Sánchez en la SER: "No es que quieran derogar el sanchismo, es que quieren derogar el progreso"
El presidente del Gobierno y candidato socialista a La Moncloa acusa al PP de "embarrar" la campaña y el debate y afirma que su "plan A, B y C es ganar".
El presidente del Gobierno y candidato socialista a La Moncloa, Pedro Sánchez, ha sido entrevistado esta mañana en la Cadena SER, en la que ha sido su primera intervención en medios tras el cara a cara que mantuvo el lunes con el aspirante del PP, Alberto Núñez Feijóo. Ante las preguntas de Àngels Barceló, ha insistido en la importancia de las elecciones generales del 23 de julio porque, dice, lo que se juega España es el progreso o el retroceso, más allá de lo puramente ideológico. "No es que quieran derogar el sanchismo, es que quieren derogar el progreso", defiende frente al bloque de PP y Vox, que sería su muleta de gobernabilidad según los sondeos.
"España no puede retroceder, debe avanzar, y esto es una involución que nos lleva 20, 30, 40, 50 años atrás, con la censura en la cultura, los derechos de las mujeres o del colectivo lgtbi, el dialogo social...", ha enumerado, pese a que las encuestas sigan indicando que son los conservadores los que le llevan delantera. Sánchez asume que sólo hay dos bloques, dos coaliciones (la suya, con Sumar) que permitirán llegar a La Moncloa y hacer cristalizar un Gobierno y que, por eso, sólo queda una disyuntiva: "es avanzar o meternos en un túnel del tiempo tenebroso".
El socialista insiste en que va a ganar las elecciones de la semana que viene por "tres razones": "lo hemos hecho bien en circunstancias absolutamente inéditas", hay una "hoja de ruta de avances logrados que merece la pena culminar" y "enfrente no hay un proyecto de país, sino planes para derogar" logros de país.
Y tan convencido está que no piensa en el día después, en el 24 de julio. "Mi plan A, mi plan B y mi plan C es ganar las elecciones, porque hemos hecho las cosas bien, tenemos un proyecto de país consolidado y, en fin, creo que España no se merece que la mentira y la involución gane". Sería, añade, "una pena y un retroceso" cuando en Europa y en el mundo nuestro país es hoy referente de apertura, "comprometido e influyente". "Honestamente, tenemos todos los argumentos y le diré que también todas las emociones para revalidar una victoria".
"Hace cuatro semanas no estábamos como estamos hoy. Hay un avance del PSOE y del bloque progresista. Nos quedan todavía ocho días de campaña", dice con un optimismo resistente, a prueba de sondeos, entre otras cosas porque las cosas han cambiado desde el 28-M: "A la izquierda del PSOE había una dispersión total y a la derecha no estaba claro que el PP fuera a gobernar con Vox". Ese escenario se ha clarificado, entiende. Pese a las preguntas repetidas sobre los sondeos, el día después, los ánimos... Sánchez ha respondido siempre lo mismo: "Es que yo voy a ganar las elecciones", "es que las voy a ganar", "estoy convencido de que las voy a ganar". Manual de resistencia 100%.
El secretario general del PSOE estima que, vistos los resultados y los pactos tras las elecciones municipales y regionales del 28 de mayo, sólo hay opciones de "un Gobierno progresista con Yolanda Díaz", con la que cree "que las cosas fluyan de manera mucho más fácil a como, por desgracia, ha ocurrido anteriormente con Unidas Podemos, va a ser más funcional"; o "de retroceso e involución", y pone ejemplos de los miembros de Vox que están tocando ya poder en parlamentos y ayuntamientos, que son "negacionistas en lo climático, van contra diversidad, personas abiertamente antivacunas y contra la evidencia científica". "¡De dónde sale esta gente!", ha lanzado, incluso. "Poner al frente de Gobiernos a personas que son abiertamente negacionistas es suicida desde el punto de vista social y una gran pérdida de oportunidad en lo económico", sentencia.
"El PP ha asumido ese tipo de discursos, lo exculpa y minimiza, le da importancia relativa", denuncia. Por eso reclama que se vote "en masa" por "el "el avance y el progreso". Incluso lanza ese mensaje a votantes no socialistas pero que apoyen estos cambios "de país" que han transformado España. "La sociología de nuestro país no es un 70% conservadora, en algunas tertulias hasta incluso el 99%, cuesta ver un progresista", ha indicado, al ser preguntado por su presencia en medios duros con el Ejecutivo.
Sobre el debate del lunes, que mayoritariamente se ha dado por ganado a Feijóo, Sánchez ha reconocido que fue "bronco" y carente de las ideas que interesan de veras a los ciudadanos. "Fue una pena que no pudiéramos debatir sobre estas cuestiones, que son las que importan a los ciudadanos, y no tanto la pelea entre partidos. Yo creo que entre todos tenemos que elevar la calidad el debate político", defiende.
Ha lamentado que "el ruido" impidiera que se pudiera escuchar el balance que hacía de su Gobierno y sus propuestas, pero cree que era difícil que eso llegara "cuando de repente tienes a alguien en frente que no para de decir mentiras o utiliza de forma descarnada el terrorismo para dividir, o cuando se blanquea de una manera tan impúdica acuerdos con Vox que ponen en solfa derechos". En la entrevista ha repetido insistentemente los términos "enfangar" y "embarrar" para referirse a la estrategia del PP de esa noche.
Y se duele de que sea así porque, a su entender, estas no son unas elecciones cualquiera, sino unas en las que la pedagogía es más importante que nunca. "No es una mera alternancia lo que está en juego, se plantea una opción de gobierno progresista o una opción de gobierno ultraconservadora con el señor Feijóo y el señor Abascal. Esta en juego un retroceso grave en cuestiones que dábamos por hecho, que dábamos por seguras".
También ha defendido Sánchez su exposición pública de estas semanas, muy acelerada respecto a la mantenida durante la legislatura, "el presidente que más ha comparecido en cortes generales" y con "700 ruedas de presa en distintos formatos". "Bastante razonable", estima. Ahora su cambio se debe a que ha querido "denunciar la descompensación entre una realidad mediática y una sociológica" que no acaba de ver.
En varias ocasiones, Àngels Barceló ha preguntado a Sánchez por qué, si tiene una hoja de servicios tan buena tras cuatro años de legislatura, las encuestas lo dan fuera del despacho que ahora ocupa. Sánchez ha explicado que no ha sido "una coyuntura fácil", con la pandemia y, "sin solución de continuidad", la guerra de Ucrania. Son cosas que no se pueden resolver "de la noche a la mañana", las políticas "necesitan consolidarse", y con tiempo se ven frutos, como ahora, dice. "Frente a eso, ha habido una oposición que no ha arrimado el hombro, sólo críticas".
¿Qué pasa con Correos?
En las últimas horas, Alberto Núñez Feijóo ha alentado la conspiración sobre Correos, pidiendo a los carteros que "repartan todos los votos" a pesar "de sus jefes". Desde a entidas han emitido un comunicado en el que reivindican "la profesionalidad de los más de 45.000 empleados y empleadas" y aseguran querer "mantenerse al margen de debates que pretenden socavar las instituciones y los servicios públicos del país", en referencia a sus palabras.
Esta mañana, Sánchez ha querido detenerse poco en este punto, con un tono indignado. Cree que esta teoría conspirativa de tiene por objeto "opacar lo que va a suceder hoy desgraciadamente en Extremadura y la Comunitat Valenciana, con dos Gobierno de coalición entre PP y Vox". "Todo esto no deja de ser una cortina de humo para que no se vean estos pactos de la vergüenza", denuncia. Ha llamado "aperitivo" de "comida indigesta" a estos primeros pactos, como la antesala de lo que puede ocurrir si llegan los dos partidos de la derecha española a La Moncloa.
Frente a estas especulaciones de aires trumpistas, el presidente garantiza a los españoles que España es una "democracia plena, robusta" y recuerda que está "en los mejores puestos de calidad democrática". Por eso, el proceso electoral será limpio; es más, ha recordado que, a diferencia de las anteriores en 2019, se ha facilitado el voto por corro de manera telemática y que va a haber una mayor participación de los españoles en el exterior. "Otros están más en embarrar y para suscitar injustificadas dudas sobre el proceso de voto en nuestro país", critica.