Revelan las claves del 'milagro ibérico' que puede posicionar a la economía española por delante de EEUU y Europa
España se ha convertido en el sexto mayor destino mundial de proyectos de inversión extranjera directa desde 2019.
España ha emergido como una potencia económica en Europa, impulsada por el turismo, la inversión extranjera y la integración de los migrantes en el mercado laboral. A pesar de los desafíos de la pandemia, nuestro país ha alcanzado un ritmo de expansión que promete colocarlo como la economía avanzada de mayor crecimiento, incluso superando a Estados Unidos.
Desde 2019, España ha registrado un crecimiento del 5,7 % en comparación con los niveles de 2019, situándose por encima del promedio de la Eurozona del 4,2 %. Según datos de Eurostat, la economía española experimentó un incremento del 0,8 % en el último trimestre, duplicando la media de la zona euro y cuadruplicando la tasa de crecimiento de Alemania, tradicional líder económico europeo, que apenas creció un 0,2 %.
De acuerdo con el Financial Times y el análisis de Consensus Economics, se espera que la economía española crezca un 2,7 % en 2024. Además, el Fondo Monetario Internacional (FMI) proyecta un crecimiento ligeramente mayor del 2,9 %, superando el 2,8 % previsto para Estados Unidos.
La integración laboral de los migrantes ha sido fundamental para la recuperación económica de España. Con una fuerza laboral en declive debido a las bajas tasas de natalidad, la incorporación de 700,000 trabajadores inmigrantes en los últimos tres años ha sido crucial. Según la Fundación Funcas, este flujo de mano de obra ha ayudado a mitigar las carencias en sectores como la agricultura y la construcción, donde los inmigrantes representan el 40 % de los nuevos empleos.
El turismo continúa siendo un pilar fundamental de la economía española, aunque el aumento en el número de visitantes genera tensiones en algunas ciudades. Pese a esto, el sector turístico proyecta ingresos de 90,000 millones de euros en 2024, y se espera que las exportaciones de servicios, como la consultoría, la educación y los servicios tecnológicos, alcancen los 100,000 millones de euros. Esta diversificación está impulsando el crecimiento, y cada vez más extranjeros eligen España para servicios especializados y estudios universitarios.
El crecimiento de la economía española también ha fortalecido la confianza de los inversores. La diferencia en los rendimientos entre los bonos españoles y alemanes, un indicador del riesgo percibido, ha disminuido hasta niveles mínimos desde enero de 2022. Según el Financial Times, España se ha convertido en el sexto mayor destino mundial de proyectos de inversión extranjera directa desde 2019, destacando en sectores como las energías renovables.
El año pasado, España lideró el sector de energías renovables junto con Estados Unidos, al asegurar 77 proyectos nuevos. Sin embargo, los inversores nacionales muestran una visión menos optimista. Raymond Torres, director de análisis de Funcas, explica que, aunque la inversión medida en formación bruta de capital fijo está en aumento, muchos empresarios españoles mantienen una perspectiva negativa sobre la situación política del país, en contraste con el optimismo de los inversores extranjeros.