PP y PSOE entierran la Ley de Concordia de Castilla y León que la derecha pactó con Vox
Un movimiento previsible, tras la ruptura de la ultra derecha y los populares por el acuerdo en materia de regularización de migrantes, que en este territorio se saldó con la salida del vicepresidente Juan García-Gallardo.
Confirmado. Al Partido Popular de Castilla y León no le interesaba tanto sacar adelante la defendida a ultranza Ley de Concordia. La misma norma que, este miércoles, las Cortes autonómicas han enterrado, al rechazarse la tramitación de la proposición de la norma que registraron conjuntamente los populares con Vox en el pasado mes de marzo. Una ley que, de acabar viendo la luz, supondría la derogación del actual decreto autonómico sobre memoria histórica.
De esta forma, los populares hacen borrón y cuenta nueva, poniendo la puntilla así uno de los grandes pactos por el que tuvo que pasar la derecha tradicional con la ultraderecha para lograr la investidura de Alfonso Fernández Mañueco. Detrás de este cambio de parecer se encuentra la ruptura que protagonizaron los de Abascal a finales de julio, por haber apoyado el PP el reparto de menores migrantes entre las distintas comunidades autónomas.
"El parecido [del PP] con el PSOE de Sánchez es cada vez más lamentable", lamentó el propio García-Gallardo esta mañana, al tiempo que dirigiéndose a la bancada popular inquirió "por qué han defendido hasta antes de ayer" esta norma. De hecho, también hizo alusión a si los populares no veían una incoherencia en que esta mañana se diese a conocer el informe favorable a su tramitación, por parte de la Junta de Castilla y León y con rúbrica del propio Mañueco, y el PP tomase dicha decisión de rechazo igualmente.
Dejar morir una polémica norma que acabaría en el Constitucional
Cabe recordar que esta propuesta de Ley de Concordia no era un hecho aislado de Castilla y León. Constituyó un auténtico eje de las exigencias de la ultraderecha a un Partido Popular que se sumó al discurso contra la memoria histórica y se articularon leyes iguales en Aragón y la Comunidad Valenciana.
El Gobierno de España aseguró que las llevaría al Tribunal Constitucional en forma de un recurso que esgrimía que choca contra la norma estatal que regula esta materia, la Ley de Recuperación de la Memoria Histórica, y que "blanquea al franquismo", en palabras del ministro Ángel Víctor Torres.
Los ecos de una ruptura que siguen pasando factura en Bambú
Mas fue el ultimátum de Vox el que acabó transformándose en el primer gran revés para los Ejecutivos autonómicos de coalición que habían suscrito PP y Vox. Y que finalmente no tuvo el alcance esperado por una cúpula de Bambú que vio cómo muchos de sus consejeros se mantenían en los Gobiernos regionales que se rompían.
Ocurrió también en el caso de Castilla y León, pero con ciertas distinciones. Tras la petición de los tres consejeros solicitaron seguir en sus cargos, Mañueco solo salvó al de Turismo, Cultura y Deporte; Gonzalo Santonja.
Y cabe recordar que el propio líder de Vox en Castilla y León, García-Gallardo, ya anticipó este desenlace y choque la semana pasada cuando trascendió que el PP -ahora libre de Vox en el Ejecutivo- dejaría morir la norma. "El PP se ha metido en un lío gordo hoy", aseguró el ex vicepresidente de Mañueco, destacando que los de Mañueco estaban haciendo un "ridículo espantoso" queriendo retirar la norma que registraron con ellos.