Nueva oleada de fugas de Guardias Civiles de Ibiza

Nueva oleada de fugas de Guardias Civiles de Ibiza

Seis agentes de la unidad de motoristas abandonan la isla, agravando la crisis que atraviesa la Guardia Civil en territorio ibicenco, una situación que sigue sin solución.

Un vehículo de la Guardia Civil circula por las calles de Ibiza.German Lama

Este lunes 16 de septiembre, la unidad de motoristas de la Guardia Civil de Tráfico en Ibiza verá cómo seis de sus agentes abandonan la isla tras solicitar el cambio de destino. Según informa El Periódico de Ibiza, este movimiento, resultado de un concurso de vacantes publicado en marzo, pone de manifiesto la grave crisis de personal que afecta a las fuerzas de seguridad en la isla, especialmente en el cuerpo de Tráfico.

La Asociación Profesional Justicia Guardia Civil (Jucil) ha expresado su preocupación por el progresivo deterioro de las plantillas en Ibiza. Si a principios de año la situación crítica se vivía en la unidad de Atestados, ahora el problema se traslada a la unidad de motoristas. Según Jucil, esta unidad debería contar con 14 agentes permanentes, pero tras estas salidas, el equipo quedará mermado.

La solución, como en ocasiones anteriores, será recurrir a comisiones de servicio, enviando agentes temporalmente a la isla. Esta medida ya se utilizó para cubrir vacantes en Atestados, pero Jucil advierte que no es una solución duradera. “Tras el fin de la operación verano, volveremos a necesitar refuerzos”, han señalado desde la asociación.

Vivienda y plus de insularidad, las causas del éxodo

La situación de Ibiza es especialmente complicada por la crisis habitacional y la elevada carestía de vida, que provocan que muchos agentes pidan el traslado en cuanto tienen oportunidad. A esto se suma la falta de un plus de insularidad adecuado, lo que, según Jucil, hace que las Baleares no sean un destino atractivo para los guardias civiles.

Las comisiones de servicio que cubren las vacantes también generan malestar. Los desplazamientos implican un gasto significativo en dietas y viajes, que en algunos casos alcanzan los 3.000 euros mensuales, lo que aumenta la frustración de los agentes desplazados.

La situación es igual de crítica en la unidad de Atestados de Tráfico, donde actualmente solo hay dos agentes en activo, y uno de ellos está de baja por paternidad. Jucil ya advirtió en febrero de que seis de los ocho agentes de la unidad iban a solicitar su traslado, lo que dejó a la unidad bajo mínimos. Aunque una comisión de servicio cubrió temporalmente las vacantes, su estancia solo estaba prevista hasta mayo, dejando nuevamente a la unidad sin efectivos suficientes.

Sin soluciones a la vista

Desde Jucil exigen que se implemente un plus de insularidad similar al que se aplicó en la Sanidad pitiusa, donde la situación de falta de personal se mitigó con un incentivo económico. “Si no se trabaja para convertir las Baleares en un destino atractivo, siempre habrá estos problemas”, lamentan desde la asociación.

Por su parte, la Guardia Civil ha confirmado que los agentes comisionados para reforzar la operación verano en la isla prolongarán su estancia hasta finales de año. Sin embargo, desde Jucil insisten en que esta es solo una medida temporal y no soluciona el problema de fondo que afecta a las fuerzas de seguridad en Ibiza.