España se hace cliente VIP del mayor enemigo del rey de Marruecos
Pese a todo, Argelia evita invertir en España.
España ha incrementado significativamente sus compras a Argelia en la última década, consolidándose como un cliente importante para el país norteafricano. Sin embargo, la situación no es recíproca, ya que Argelia ha reducido sus compras de productos españoles a una décima parte de lo que adquiría en 2014. Este cambio se debe, en parte, al giro en la política exterior española sobre el Sáhara Occidental en marzo de 2022, alineándose con Marruecos, el principal rival de Argelia.
Las empresas españolas enfrentan serias dificultades para colocar sus productos en Argelia, mientras que los productos energéticos y otros bienes argelinos continúan ingresando al mercado español. Según los datos más recientes de ICEX España Exportación e Inversiones, en 2022 las exportaciones españolas hacia Argelia cayeron un 41,9% respecto al año anterior, alcanzando solo 1.021 millones de euros. En contraste, las importaciones desde Argelia crecieron un 59,32%, llegando a 7.597 millones de euros.
Estos resultados, que se repitieron de manera similar al cierre de 2023, reflejan la importancia de Argelia como proveedor de energía para España, en un contexto marcado por el aumento de precios de los hidrocarburos tras el conflicto en Ucrania. En 2022, España compró a Argelia el 23,9% del gas que importó, porcentaje que aumentó al 29% en 2023, aunque a precios más elevados.
En los últimos dos años, las exportaciones españolas hacia Argelia han disminuido drásticamente, acentuándose a partir de junio de 2022, cuando los bancos argelinos dejaron de aceptar domiciliaciones bancarias para operaciones comerciales con empresas españolas. Los sectores más afectados por esta medida son el alimentario y el primario.
A pesar de estas dificultades, la empresa argelina Tosyali ha conseguido un contrato para exportar 150.000 toneladas de hierro a España, lo que indica cierta apertura en las relaciones comerciales. A su vez, desde el inicio de 2024, se han observado avances en la flexibilización de las restricciones, impulsados por las necesidades alimentarias argelinas. El 15 de enero de 2024, la Asociación de Bancos y Establecimientos Financieros de Argelia (ABEF) permitió la importación de productos avícolas desde España, y un mes después se autorizó la importación de carne roja fresca.
El retorno del embajador argelino a España y el acuerdo entre Naturgy y la estatal argelina Sonatrach sobre los precios del gas reflejan una tendencia hacia la normalización de las relaciones bilaterales. No obstante, las restricciones impuestas en 2022 siguen afectando a otros sectores, y las empresas españolas deben seguir un proceso riguroso para reanudar sus actividades en Argelia, incluyendo la obtención de licencias y permisos necesarios antes de realizar cualquier operación comercial.