Nadia Calviño presidirá el Banco Europeo de Inversiones tras lograr los apoyos necesarios

Ya hay noticia. El Ecofin ha elegido a la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, como nueva presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI). 

Este este viernes ha logrado los apoyos necesarios para ser la nueva presidenta del principal banco público de la Unión Europea, lo que pone fin al proceso político informal y permitirá pasar al procedimiento formal del BEI.

Los ministros de Finanzas europeos han dado el 'si' definitivo a la candidatura de Calviño, tras un período bastante tedioso y largo que arranco desde el mes de agosto con la presentación pública de su candidatura.

El visto bueno del Ecofin

Con los focos en Bruselas, la vicepresidenta primera era la gran favorita en la última reunión del Ecofin. Había temor al posible rechazo de Francia, pero su ministro, Bruno Le Maire, se ha terminado decantando por la española.

Tras constatar que Calviño ha sido la única candidata que reúne respaldo suficiente, el ministro de Finanzas belga, Vincent van Peteghem, que ostenta la presidencia rotatoria del Consejo de Gobernadores del BEI, hará una propuesta al Consejo de Administración de cara a una votación final oficial.

"El apoyo de los ministros de Finanzas a nuestra candidatura es una muy buena noticia. Es la primera vez que España va a liderar el Banco Europeo de Inversiones, una institución fundamental para la economía europea", ha destacado la vicepresidenta primera del Gobierno de España en declaraciones a la prensa tras su elección.

Calviño ha añadido que el nombramiento confirma "el aprecio, respeto y liderazgo de España en el ámbito europeo e internacional que hemos logrado con el duro e intenso trabajo de estos últimos años".

Los próximos pasos

Calviño, que sucederá a Werner Hoyer al frente del BEI durante los próximos seis años, se disputaba el puesto con Vestager como principal rival, pero también con la polaca Teresa Czerwinska, el italiano Daniele Franco y el sueco Thomas Östros.

Tras la designación a nivel político, ahora arrancará el proceso formal de nominación. El país del candidato elegido, España en este caso, tiene que pedir a la secretaría del BEI que inicie el proceso de votación.

El primer paso es que el consejo de administración del BEI adopte una recomendación para nominar a Calviño, que debe ser aprobada por mayoría cualificada, más 18 países que representen el 68 % del capital.

El consejo de administración del BEI tiene previsto reunirse el próximo miércoles, informó el ministro belga, quien no precisó cuanto podría durar el proceso formal de nominación, pero insistió en que debe concluir a tiempo para que el 1 de enero de 2024 el nuevo presidente asuma el cargo.

Según una norma establecida en 1958 por el Consejo de Gobernadores, el presidente del BEI recibe el mismo salario mensual que el presidente de la Comisión Europea, por lo que Calviño percibirá, al igual que Ursula von der Leyen, en torno a 375.000 euros anuales, lo que supone un suelo de más de 30.000 euros al mes.