Este país europeo tira la toalla y pierde toda esperanza de erradicar la plaga viscosa que le vino de España
En realidad, otro país europeo que sucumbe ante toda una invasión con evocación (mala) a nuestro país.
Continúan los problemas ambientales en Europa por una plaga cuyo nombre alude directamente a España. Hasta tal punto que ya se da por arrojada prácticamente la toalla. Se trata del calvario que enfrentan en Estonia por la invasión de la 'babosa española' (Auricon lusitanicus), en nuestro país -y en Francia o Andorra- lógicamente conocida como babosa común.
Si cuando comenzó a proliferar este molusco gasterópodo -presumiblemente llegados sus huevos en tierra de plantas procedentes de viveros de otros países- se creía que no pasaría de una plaga puntual, el tiempo acabó demostrando que el duro invierno estonio no era suficiente para acabar con el problema. Los huevos de esta especie pueden soportar temperaturas muy bajas, en algunos casos inferiores a los -100 grados centígrados.
Lo que comenzó con una invasión de jardines y patios se acabó trasladando al campo, dando lugar a una amenaza creciente contra el sector de la horticultura. Bien, según el medio estonio News Err que ha venido siguiendo el avance de la 'babosa española', para ciertas autoridades estonias ya se ha confirmado el peor de los pronósticos. Esta especie invasora ya forma parte para siempre de Estonia.
"Probablemente, ya no sea posible deshacerse de ellas"
En este sentido, se ha pronunciado Eike Tammekänd, director de la oficina de conservación de la naturaleza de la Oficina de Medio Ambiente, quien en declaraciones recogidas por el citado medio local explica que "la situación ha empeorado y se han extendido a muchos más lugares. La mayor propagación se ha producido claramente en la zona de Tallin, sobre todo en las nuevas urbanizaciones, donde se han plantado muchas plantas ornamentales y se ha incorporado mantillo".
El experto recuerda que "así es como se han extendido sobre todo. Un factor que ha favorecido su propagación en los últimos años son los inviernos suaves, que han aumentado considerablemente su tasa de supervivencia".
En esa línea, Tammekänd opina que "probablemente, ya no sea posible deshacerse de ellas ['babosa española'] en Estonia, ya que su población y propagación son tan amplias que es imposible encontrar todos sus huevos en todas partes", dijo Tammekänd.