Adiós a la sal: piden espolvorear la súper solución amable con las plantas para acabar con la nieve de la calzada

La llegada del invierno siempre está acompañada de míticas escenas que responden a tareas y preparativos destinadas a evitar desastres y accidentes fatales. La más clásica de esta estampa se registra en las carreteras en forma de colocación de cadenas en las ruedas de los vehículos, pero también en quitanieves y maquinaria pesada que esparce sal para evitar que se congele la calzada.

No obstante, el cloruro de sodio tiene un efecto pernicioso sobre la vegetación, por lo que reproducir este sistema más allá de las carreteras, en sendas con jardines o vegetación, puede suponer erradicar la flora existente o dañarla en gran medida.

Con todo, según recoge el portal húngaro Kirsche, hay una alternativa mucho más respetable con las plantas y que funciona igual de bien o mejor que la sal. 

La alternativa a la sal para evitar hielo en carreteras y caminos

Según la mencionada información, una gran alternativa la conforma el cloruro de calcio, asegurando que es mucho más eficaz que la sal para carreteras. "Funciona incluso a temperaturas muy bajas, hasta -20 grados centígrados, y conserva sus propiedades hasta 72 horas después de ser rociado sobre la carretera. Las escamas se adhieren fuertemente a la superficie de la carretera, por lo que no se esparcen por la zona como la sal", detalla la información.

Su ventaja respecto a la flora es que no la daña ni corroen las piezas metálicas de los vehículos. Tampoco decolora ni el pavimento ni los adoquines o deja marca en los zapatos. Su método de uso es sencillo, solo hay que limpiar la superficie de la nieve y espolvorear las escamas de cloruro de calcio sobre la superficie helada, esperando unos minutos a que haga efecto. Además es fácil de encontrar en tiendas de bricolaje o jardinería.