Por motivos muy variados, la hinchazón de vientre, los gases o las náuseas son compañeros habituales en esta época del año. Nuestro cuerpo es el reflejo de lo que va bien y lo que no va tan bien. Es importante aprender a escucharlo, y la práctica de yoga es una herramienta excelente para conseguirlo.
Seguimos creyendo que estas cosas nos harán felices. Seré feliz cuando tenga un coche nuevo. Seré feliz cuando me case. Seré feliz cuando tenga un trabajo mejor. Seré feliz cuando pierda unos kilos... ¿Y si en vez de eso decidimos ser felices, ahora?