Las personas que padecen un trastorno bipolar experimentan cambios de ánimo muy extremos. En ocasiones, se sienten excesivamente felices, animados y mucho más activos que de costumbre. Esto se llama manía. Y otras veces se sienten supertristes y deprimidos, y están totalmente inactivos. Esto se llama depresión.
Cada vez es menos novedoso que la industria televisiva contemple en sus series personajes femeninos complejos y con aristas. Sin embargo, últimamente llama la atención el creciente número de series con protagonista que, además de ser mujer, presenta un trastorno mental.