El actual santo y seña para un falso y caza incautos patriotismo, es todo el catálogo de progreso que ha dado forma a la actual civilización española, y europea.
Las tres derechas -en rigor, la derecha española, en esto la peor de Europa- han quebrantado, una por una, más allá de lo insufrible, todas y cada una de las reglas de corrección en su comportamiento en la UE ante cuestiones nacionales y de interés de España.
Insoportable contradicción la de quien recurre a decretos de emergencia con suspensión por seis meses de las reglas europeas, y al mismo tiempo torpedea y vota contra los trabajos que el PE viene impulsando.
"Si los bares desaparecen, a los paisanos no les quedará otra que encerrarse en la propia, sin más charla que la confusa y dañina de 'Sálvame' y una botella de vino no menos deplorable".
Esta ley responde a un gran anhelo de los colectivos artísticos, largamente esperado (desde la LOGSE, hace 33 años, que las definió como Enseñanzas de Régimen Especial).
Se habla con entera impunidad de que el Gobierno ha dado un golpe de Estado. Vox lanza esas acusaciones y el Partido Popular las reproduce con hipocresía, mientras un coro de medios derechistas hace de amplificador.