Jeb era todo lo que se esperaba de un Bush: alto, inteligente, estudioso, valiente, bien educado. George era el mayor, pero era bajito, intelectualmente mediocre y problemático.
Anoche se llevó a cabo el segundo debate de los aspirantes Republicanos a las elecciones primarias de su partido. Pudo ser el principio del fin de Trump, aunque hasta el rabo todo es toro. Rand Paul demostró que está fuera de la carrera, y surgen con fuerza Carly Fiorina y Marco Rubio. Jeb Bush sigue siendo una incógnita.