financiación ilegal
Asuntos no tan internos
Rajoy y Cospedal se encuentran ante la disyuntiva de intentar circunscribir a Bárcenas las prácticas irregulares, algo complicado ante quien ha controlado durante 20 años los dineros del aparato, o levantar las alfombras y mostrar lo que hay debajo: años de gestión opaca e ilegal en el mismo corazón del partido. Pero no tienen elección. Ni la ironía -"¡Sí, hombre!"- ni las palabras grandilocuentes -"No me temblará la mano"- son suficientes para aplacar la indignación.