Marco financiero, unión monetaria, Brexit, refugiados, ultraderecha, guerras comerciales, modelo de defensa, cambio de hora... Muchas tareas para los eurodiputados y la Comisión.
Felicidades, Marine Le Pen y Geert Wilders. Hoy estáis de enhorabuena. Pero lo que no sabéis es que mientras celebráis a bombo y platillo vuestra gran boda eurófoba, hay una enorme masa de jóvenes (y no tan jóvenes) dispuestos a aguaros la luna de miel.
Supongamos que, por fin, reunimos la voluntad necesaria para resolver la crisis de la eurozona. Supongamos que acordamos los grandes pasos futuros de la integración para las decisiones económicas europeas como parte de esa resolución. En ese momento, tendremos que estar razonablemente seguros de que la unión política va a obtener el acuerdo necesario.