A un lado, mujeres defendiendo el derecho a decidir sobre sus propios cuerpos. Al otro, hombres y mujeres defendiendo el derecho a decidir sobre cuerpos ajenos
La frase se atribuye a un magistrado de nuestro Constitucional, Andrés Ollero, a la sazón ponente de la sentencia del recurso que presentó el PP a la Ley de Derechos Sexuales y Reproductivo e IVE. Quienes no ganamos para sustos cuando gobierna la derecha en este país somos las mujeres.
Hoy día cada vez hay más gente que puede decir "a mi no me parió mi madre, me parió mi gestante". Las posibilidades que abren las Técnicas de Reproducción Asistida permiten que el papel de madre se reparta entre más mujeres, de manera que ya no es tan fácil identificar a quien antes se consideraba como la "verdadera" madre.
La visibilidad ha llevado a la aceptación. Muchos de los comentarios que se hacían con tanta tranquilidad hace sólo siete años, resultan hoy intolerablemente homófobos. Pero el desconocimiento sigue ahí, a juzgar por la cantidad de explicaciones que uno tiene que dar.
Nuestra realidad ya no se esconde ni es objeto de programas amarillos. Todavía nos queda mucho por conseguir, pero este Orgullo 2012 estamos de celebración.