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Ser lesbiana en 2014
Ser lesbiana en 2014 es ser una mujer que estudia, trabaja, busca empleo, emprende, vota, se embaraza, se casa, se divorcia. Una poliamorosa o alguien que comparte lecho con una sola mujer durante gran parte de su vida. Tan normal que otros tiempos, no lejanos, llegan a parecernos ajenos.
¿Qué matrimonio defiendes?
¿Para tí qué es el matrimonio? Nejoud al Ahdal, yemení, lo descubrió a los 12 años, cuando después de una breve ceremonia, un hombre de 28 años la alejó de su familia y la llevó a vivir a casa de sus padres, donde la violó y la golpeó cada noche durante casi un año.
El Congreso debe aprobar la Ley de No Discriminación en el empleo
Millones de estadounidenses LGBT van cada día a trabajar con el temor a perder su empleo sin avisar, no por algo que hayan hecho, sino solo por lo que son. Es un escándalo. Es injusto. Y tiene que acabar, porque, en los Estados Unidos de América, quién es una persona y a quién quiere no deberían ser nunca motivos de despido. En Estados Unidos nos une un principio fundamental: todos somos creados iguales, y cada ciudadano estadounidense merece el mismo trato ante la ley.
La pluma es nuestra raza
Cuando criticamos la pluma en el desfile del orgullo criticamos a los que han sido torturados por hacer visible su homosexualidad. Si no hubiera sido por ellos, jamás habríamos conseguido nada. No habríamos existido. Seguiríamos practicando sexo a escondidas expuestos al chantaje.
Cultura gay en Madrid
Las fiestas del Orgullo Gay dejan muchos millones y ofrecen la imagen de una ciudad abierta. Pero eso no les gusta a los políticos locales ultra conservadores, más bien les disgusta y mucho. Prefieren vernos más pobres, pero más heterosexuales y más aburridos.