Las mujeres, por ser mujeres, se enfrentan a barreras únicas en lo que a su seguridad y su salud se refiere. Muchas de estas cuestiones no están a nuestro alcance por estar culturalmente arraigadas, pero hay otras que sí se pueden tratar y tienen soluciones fáciles y de gran impacto. En Kenia, el coste medio de un paquete de compresas es de 75 chelines (0,70 €). Aunque parezca una cantidad mínima, la media diaria de ingresos para trabajadores no cualificados se sitúa en torno a 1 euro, lo que significa que las compresas no son asequibles para miles de mujeres.