Con vapor en vez de partículas tóxicas el artista Michael Pinsky simula, en la Cumbre del Clima, cómo es vivir en Nueva Delhi, Pekín, Londres o Sao Paolo.
"Es un ejemplo del paternalismo de Occidente", "ha servido para movilizar a los más jóvenes", "la están utilizando"... Y otras cosas que opinan sobre la adolescente en la COP25.
Lo cosa pinta mal, aunque tampoco parece demasiado grave: hay convocadas huelgas de autobuses, concentraciones y en la capital habrá 25.000 personas más.