Ocurrió el pasado miércoles frente al Consulado de Israel en Boston, aparentemente para protestar por la ofensiva militar israelí sobre la Franja de Gaza.
Estas líneas son mi pequeño homenaje a Sara, a la que tanto insistimos en que Boston era la ciudad perfecta para estudiar y disfrutar de una vida universitaria, deportiva, divertida, pacífica... Vivimos desde hace dos años en la fascinante y turbulenta Ciudad de México, inmerecidamente una de las ciudades con peor imagen del mundo. Siempre quisimos verla en el mejor escenario. ¿Alguien sabe cómo encontrarlo?