El contagio puede generar graves consecuencias y desembocar incluso en la muerte de la persona afectada. Aún no cuenta con ninguna cura, por lo que su prevención resulta fundamental.
El fallecido es un paciente de unos 50 años de nacionalidad surcoreana fallecido tras regresar el pasado 10 de diciembre de una estancia de cuatro meses en Tailandia.