No tenemos un sueldo a final de mes, y eso que hacemos horas extra. Ni vacaciones, ni días de asuntos propios, ni bajas por enfermedad. Somos conscientes de que solo hay una fuente de ingresos en la familia y ajustamos los presupuestos como corresponde. Aun así, tengo la certeza de que, al menos por ahora, este es mi lugar.