Innovación en tiempos de ébola
Es necesario inventar nuevas herramientas y equipamiento para proteger mejor a los trabajadores sanitarios en el terreno. Trajes baratos más seguros con sistemas eficientes de refrigeración, más sencillos de poner y quitar, y de destruir. España está ante una oportunidad única para contribuir a nivel global. Lo que se invente y pruebe en España durante esta crisis podría ser trasladable a los países mas afectados.
La llegada del ébola a España y Estados Unidos ha despertado por fin a la opinión pública de Occidente. Probablemente estamos viviendo la mayor amenaza para la salud global desde el VIH y la ventana de oportunidad para frenarla se está cerrando. Necesitamos una respuesta a nivel global. Sólo mirarnos el ombligo e intentar que el virus no cruce nuestras fronteras es irresponsable y una tarea casi imposible. Como la OMS declaró hace unos días, nuevos casos de ébola se esperan en Europa en las próximas semanas. Lo verdaderamente importante es ayudar a frenar la epidemia en Guinea, Sierra Leona y Liberia, donde el ébola ya se ha cobrado más de 4000 vidas y sigue sumando. A día de hoy crece de manera exponencial, y el número de infectados se duplica cada 3 ó 4 semanas. Este ritmo ha obligado a plantear una hipótesis inimaginable meses atrás- cuando Médicos Sin Fronteras daba la voz de alarma: que el ébola haya llegado para quedarse y se convierta en endémico.
La magnitud de la crisis sanitaria la ha hecho diferente. Es una crisis global y multidimensional con impacto no solo en salud, sino también en los ámbitos económico, político y social. Por ejemplo, el PIB de los países afectados bajará dramáticamente y existe una crisis de seguridad alimentaria sin precedentes. Por no mencionar los miles de niños huérfanos que está dejando la epidemia. En este contexto, el mundo necesita soluciones inmediatas a problemas médicos - vacuna y tratamientos, una cantidad ingente de recursos y personal en el terreno que pueda tratar a los enfermos y garantizar a la población el acceso los servicios básicos. Y también ideas innovadoras a todos los niveles a multitud de problemas. En agosto el Reino Unido lanzaba una llamada a innovaciones contra el ébola, la agencia americana de cooperación y desarrollo acaba de abrir otra convocatoria, la fundación Gates ha donado 50 millones y la prestigiosa empresa de diseño IDEO recopila una lluvia de ideas innovadoras. Ciudadanos, emprendedores, empresas, y gobiernos, todos tenemos un pedacito de responsabilidad y una oportunidad para contribuir.
Es necesario inventar nuevas herramientas y equipamiento para proteger mejor a los trabajadores sanitarios en el terreno. Trajes baratos más seguros con sistemas eficientes de refrigeración, más sencillos de poner y quitar, y de destruir. Son necesarias innovaciones en la manera de diseñar y construir centros de tratamiento y aislamiento, así como métodos eficaces de eliminar residuos y realizar descontaminaciones exprés. Necesitamos nuevas herramientas para recoger los datos y seguir los contactos que potencialmente podrían estar infectados. Particularmente relevantes son las nuevas metodologías basadas en telefonía móvil. Se está trabajando en sistemas de información que conectan a los trabajadores sanitarios con el sistema centralizado para poder ofrecer, por ejemplo, información sobre camas libres en hospitales. Se podrían desarrollar apps o sistemas SMS compatibles con todo tipo de teléfonos que ayudasen al seguimiento de casos potenciales- incluso sincronizando termómetros a los teléfonos para tomar la temperatura y enviarla automáticamente al centro de salud responsable cuando fuese necesario. El análisis de metadatos de tráfico de telefonía móvil, como por ejemplo el número de teléfonos anónimos que se desplazan de una ciudad a otra, se podría utilizar para generar modelos probabilísticos de expansión de la epidemia y decidir a dónde destinar los recursos para que sean mas efectivos. Necesitamos maneras eficaces de informar a la población y comunicar cómo se transmite el virus y cómo protegerse. Con las escuelas cerradas, se necesita educar a los niños desde casa - ya sea con Facebook, radio o la televisión. También necesitamos maneras diferentes de luchar contra la rumorología y el oportunismo, una batalla informativa en todos los campos mediáticos, desde estaciones de radio hasta redes sociales donde la información falsa corre como la pólvora.
Ahora España está ante una oportunidad única para contribuir a nivel global. Lo que se invente y pruebe en España durante esta crisis podría ser trasladable a los países mas afectados, aunque muchos de los retos solo se podrán afrontar en el terreno. De la misma manera que IKEA está ayudando a ACNUR en la creación de un nuevo tipo de viviendas para refugiados, ¿Podría el imperio textil y químico español trabajar en crear la nueva generación de traje protector? ¿Podrían las constructoras más potentes del mundo (que resultan ser españolas) poner su conocimiento y músculo a trabajar en construir los hospitales y las infraestructuras necesarias en los países africanos que las necesitan? Actualmente se estima haber recaudado el 25% del dinero necesario para la respuesta inmediata. ¿Podrían los clubes de fútbol españoles - todopoderosos agentes mediáticos- ayudar a recaudar fondos para la respuesta contra el ébola?
Nos cuenta el profesor Hans Rosling: "Noruega repatrió a un doctor contagiado, se dio cuenta del problema y a cambio envió a 50 doctores". Hay que actuar ahora o será demasiado tarde y el ébola habrá llegado para quedarse de manera permanente. Lo que está pasando en África es responsabilidad de todos.