Borja Prado pierde poder editorial en Mediaset tras una nueva reorganización del grupo

La fusión de Mediaset España con su matriz Media For Europe (MFE) ya ha traído las primeras consecuencias directas al ejecutivo español más polémico del grupo, Borja Prado. La última reorganización estructural de la compañía le deja sin peso en las decisiones editoriales y limita su figura a funciones institucionales.

En las últimas semanas el presidente de la entidad mediática ha estado en el punto de mira por los sorprendentes cambios en la parrilla de Telecinco enfocados a romper con lo 'woke' y hacer una televisión "blanca y familiar". El fin de Sálvame es ejemplo de ello. Y es que, como ya explicó El HuffPost, fuentes de la cadena comentaron que la decisión fue tomada en petit comité entre Prado y la directora de Comunicación, Sandra Fernández.

El revuelo mediático ocasionado, las protestas en redes sociales y las altas audiencias de las últimas entregas del programa vespertino habrían generado un clima especialmente tenso entre los mandamases del conglomerado. Según fuentes del sector, uno de los CEO que sustituyeron a Paolo Vasile, Alessandro Salem, ha mostrado en varios encuentros privados su 'desacuerdo' con las decisiones de Prado y ha criticado que el presidente estuviera 'sobrepasando' sus funciones con el fin de endurecer la línea editorial en exceso "sin saber de televisión". 

Casualidad o no, a partir de ahora estas decisiones estarán pilotadas por Salem, al que a su vez reportará Massimo Musolino, también consejero delegado, pero en su caso enfocado en la gestión y las operaciones. Lo mismo ocurrirá con las direcciones de Contenidos, Informativos, Comunicación y Publiespaña. De esta manera, el nuevo organigrama deja un vencedor y un vencido: Alessandro Salem toma los mandos de Mediaset tras la fusión.