Se vende servicio de bomberos
¿Cuánto costará que te apaguen la casa si se te incendia? ¿Cuánto costará que te saquen del coche si te quedas atrapado después de sufrir un accidente? Parece un buen negocio porque cualquiera está dispuesto a pagar para que le salven la vida. Preparemos los bolsillos. Un Gobierno que ha puesto a la venta nuestra sanidad y mercadea sin rubor alguno con nuestra educación, no tendrá ningún reparo en entregar al mejor postor nuestra seguridad.
En agosto, unos vecinos se quedaron encerrados en el ascensor. Hacía calor, y uno de ellos se empezó a agobiar. Opté por avisar a los bomberos, pero antes tuve que convencer al resto de mis vecinos de que la comunidad de propietarios del edificio no tendría que pagar nada. Gracias a que es público y no privado, ese servicio ya está pagado con los impuestos que salen cada mes del bolsillo de todos y cada uno de nosotros. En este caso, del conjunto de ciudadanos de la Comunidad de Madrid.
Por desgracia, no falta mucho para que te pasen la factura después de sacarte al borde de una lipotimia del ascensor. La privatización de este servicio público hará necesario para la empresa privada (gestora) que estos servicios se cobren. Este caso no será grave porque la cuantía supongo que no será demasiada. Pero ¿cuánto costará que te apaguen la casa si se te incendia?, ¿cuánto costará que te saquen del coche si te quedas atrapado después de sufrir un accidente?
Parece un buen negocio porque cualquiera está dispuesto a pagar para que le salven la vida. Preparemos los bolsillos. Un Gobierno que ha puesto a la venta nuestra sanidad y mercadea sin rubor alguno con nuestra educación, no tendrá ningún reparo en entregar al mejor postor nuestra seguridad.
De hecho, el servicio de bomberos de la Comunidad de Madrid ya se está privatizando, que nadie tenga duda. El almacén que nos sirve el vestuario que se estropea, la herramienta que se avería, etc., ya está privatizado. A día de hoy, se está procediendo a la privatización del servicio de formación, el paso previo a la privatización del servicio.
Bomberos entrenando tácticas ante un escape de gas.. Foto: Bomberos CM.
La formación en bomberos es fundamental, el talón de Aquiles. La formación que recibimos nos mantiene al día de las novedades, aprendemos nuevas técnicas y entrenamos protocolos más eficaces.
La privatización de la formación de los bomberos de la Comunidad de Madrid es un claro ejemplo de cómo alguien elegido se puede enriquecer con el dinero de todos: las instalaciones necesarias las pone el servicio de bomberos, las herramientas necesarias las pone el servicio de bomberos, el único profesorado preparado para impartir la formación es la del propio servicio de bomberos y... tachán... tachán... magia... Tenemos una empresa que se embolsa dinero público sin aportar absolutamente nada, porque el servicio de formación ya funcionaba y estaba dotado con todo lo necesario, gracias a nuestros impuestos.
Ante este absurdo, el político de turno sale en los medios de comunicación diciendo que se ahorran "x" dinero y los ciudadanos nos quedamos más tranquilos. Pero ¿dónde está aquí el ahorro económico? La mentira se ha instalado hasta tal punto que ya nos hemos acostumbrado. Mal vamos.
Bomberos practicando técnicas de rescate en altura. Foto: Bomberos CM.
Los políticos gallegos se jactan de tener el mejor servicio de bomberos de España. Es privado en su mayor parte (sólo 8 parques públicos y 23 privados). Estos 23 parques están gestionados por empresas diferentes, lo que hace que ante un siniestro importante (por ejemplo el accidente del tren Alvia) exista una absoluta descoordinación. Distintos protocolos de actuación, diferentes equipos de comunicación (indispensables en nuestro trabajo), diferente material y un largo etcétera. Todo eso repercute negativamente en el tratamiento a la víctima.
El servicio público de todos y para todos pasa a ser el negocio de alguien que suele ser familia de, amigo de o similar, sobre el que nunca recaen las críticas de los ciudadanos. Claro que antes, el Gobierno ya se ha encargado de decir otras mentiras como que los bomberos sólo trabajamos un día a la semana, que cobramos mucho y que no hacemos nada. Los profesores fueron vagos, los médicos pluriempleados y los jueces no tenían motivos para quejarse. Los pensionistas imagino que tienen mucho poder adquisitivo.
Si para este Gobierno los servicios públicos no tienen ningún valor y cada vez se dedica menos dinero a ellos, ¿a dónde se dirige el dinero que pagamos mensualmente en forma de impuestos? Me temo que cuando hayan acabado de malvender todo bien público, presumirán porque nos bajan una migaja los impuestos y la mentira volverá a empezar.