Compra un anillo de 8 euros en el mercadillo y 30 años después se percata de que vale una millonada
Debra Goddard quiso ayudar a su madre tras ser estafada y comprobó que le había cambiado la vida.
Debra Goddard, una mujer de 55 años de Noruega, se ha convertido en protagonista de una historia sorprendente que une la casualidad con el valor de una antigua compra. Hace 33 años, cuando tenía solo 22, Debra adquirió un anillo en un mercadillo noruego por apenas 100 coronas, creyendo que la hermosa piedra que decoraba el anillo era simplemente de vidrio. Jamás imaginó que esa compra le traería una fortuna inesperada décadas después.
Tras la estafa de la que fue víctima su madre, Debra, con la esperanza de reunir algo de dinero para ayudarla, decidió llevar el anillo a una joyería. Al examinarlo, el joyero quedó impactado: el anillo contenía un diamante auténtico de 26,27 quilates. “Cuando fui al joyero, casi se desmaya y me dijo: ‘¿Sabes qué es esto? Es un diamante’. Me quedé sin palabras”, confesó Debra al medio británico The Sun.
Para gestionar esta inesperada fortuna, Debra confió el anillo a la casa de subastas Sotheby’s, que confirmó su valor y lo vendió en su nombre. El diamante fue tasado en 6,3 millones de coronas noruegas, de las cuales Debra recibió finalmente 4 millones.
Lejos de usar su nueva fortuna solo para sí misma, Debra decidió destinar parte del dinero a experiencias para su madre, llevándola a Barbados y a ver espectáculos en Las Vegas, incluyendo presentaciones de Tom Jones y Céline Dion.