Reino Unido cae rendida ante el pueblo más bonito de las Islas Baleares "por sus vistas impresionantes"

Reino Unido cae rendida ante el pueblo más bonito de las Islas Baleares "por sus vistas impresionantes"

Un municipio costero que combina belleza con una gran oferta cultural.

La Cala San Vicenç de Pollensa, en una imagen de archivoEducation Images / Universal Images Group vía Getty Images

Las Islas Baleares se han consolidado como uno de los destinos predilectos para los visitantes británicos gracias a su combinación única de playas paradisíacas, clima mediterráneo, rica cultura y excelente gastronomía. Especialmente Mallorca atrae a miles de turistas del Reino Unido con su impresionante diversidad y su ocio nocturno. En concreto, una de sus pintorescas localidades costeras ha conseguido enamorar a los vecinos anglosajones.

Estamos hablando de Puerto de Pollensa, un pueblo situado al norte de la isla que ha sido coronado como el “más bonito” de las Baleares por la Asociación de Pueblos Más Bonitos de España. Famoso por sus aguas cristalinas, su paseo marítimo flanqueado por pinos y su ambiente relajado, este municipio pesquero es un símbolo de tranquilidad y belleza, dos cualidades que se han ganado el corazón de todo tipo de visitantes.

Según el medio Daily Express, Puerto de Pollensa (Port de Pollença en catalán) es particularmente preferido por los británicos “en parte debido a sus impresionantes vistas a las montañas”. Y no es para menos, ya que este enclave privilegiado combina a la perfección la majestuosidad de la sierra de Tramuntana, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, con un puerto lleno de vida que mantiene su esencia tradicional.

Una gran oferta cultural

El vínculo entre Puerto de Pollensa y el público británico no es nuevo. Desde hace décadas, muchos residentes del Reino Unido han decidido establecer aquí su segunda residencia, atraídos por la calidez de su gente y su estilo de vida mediterráneo. Además, el turismo anglosajón en las Islas Baleares es un hecho que se repite año tras año por su gran variedad de opciones gastronómicas, su amplia oferta hostelera y las extensas playas llenas de palmeras.

Los restaurantes locales han sabido adaptar sus menús para incluir sabores internacionales sin perder su esencia mallorquina, ofreciendo desde paellas y mariscos frescos hasta tés al estilo inglés para sus huéspedes más fieles. A su vez, en el pueblo se pueden realizar un sinfín de actividades al aire libre para disfrutar del mejor ambiente posible: desde excursiones en barco por la Bahía de Pollensa hasta rutas de senderismo hasta el mirador de Formentor. 

Para los amantes del deporte, en la isla el ciclismo y los deportes acuáticos son una opción recurrente, mientras que aquellos que prefieren la tranquilidad también pueden disfrutar de un día de desconexión en la playa o explorando los mercadillos locales. En definitiva, Puerto de Pollensa es un destino que conquista los corazones de todos los que lo visitan. Por ello, no es de extrañar que cuando muchos británicos terminan sus vacaciones aquí ya están planeando su regreso.