La medida radical en una playa de España contra las medusas desata la polémica

Las medusas están proliferando cada vez más en algunas zonas de la costa española, por lo que algunos ayuntamientos o comunidades están intentando tomar medidas para que estos animales dañen lo menos posible a los bañistas que llenan los arenales en estos meses de verano.  

Una de las opciones más extendidas son las redes antimedusas, que se colocan a modo de barrera. Estas redes se han utilizado repetidamente durante años en zonas como Murcia, que este año ya ha confirmado que volverán a instalarlas en varias playas del norte de la Manga del Mar Menor y el municipio de San Pedro del Pinatar. 

A pesar de que estas redes favorecen el baño, los científicos no las recomiendan ya que dificultan la circulación del agua en las zonas en las que se instalan. "Se debe considerar que estas mallas producen mortalidad en ciertas especies que quedan retenidas en ellas, se tapizarían con las ovas de rápido crecimiento imponiendo restricciones a las corrientes del Mar Menor y la acumulación de materia orgánica, seguida de una degradación de la misma, implicaría enfangamiento de las playas, malos olores y un consumo del oxígeno disuelto de forma local", advirtió el verano pasado el científico Ángel Pérez Ruzafa en declaraciones a Onda Cero.

Desde la Consejería de Medio Ambiente se ha insistido en que las instalaciones serán "casi quirúrgicas" en zonas donde la situación así lo requiera y que se colocarán antes de que termine el mes de julio.

Según Comité de asesoramiento científico del Mar Menor, la situación del mar es óptima para instalar estas redes. Además, se descarta instalar hasta 40 kilómetros de redes como se había hecho en otros años y recuerdan que las medusas tienen un lugar importante en la cadena trófica ya que ayudan a regular el ecosistema evitando una acumulación de nutrientes.