Soy técnica nutricionista y este es el caldo que me preparo para lucir la piel y el pelo perfectos
Es sencillo de hacer y la clave está en la constancia, en tomarlo a menudo, y en combinarlo con una dieta variada y equilibrada.
Cuidar de nuestra alimentación no sólo mejora nuestra salud general, también tiene un impacto directo en la piel, el cabello y nuestra apariencia. Como técnica nutricionista, Ana Luzón explica que ella ha aprendido a incorporar alimentos ricos en nutrientes esenciales que potencian el brillo natural de la piel y la fortaleza del cabello. "Y uno de mis mayores aliados es un caldo sencillo pero poderoso, cargado de ingredientes que nutren desde dentro", revela esta técnica en nutrición y dietética.
"Este caldo no es una solución mágica, pero cuando lo conviertes en un hábito, notarás cómo tu piel se ve más luminosa y tu cabello más saludable. Además, es reconfortante y fácil de preparar", asegura Luzón. Y enumera los beneficios detrás de este caldo tan especial.
Te va a aportar colágeno natural, imprescindible para la elasticidad de la piel y la fortaleza del cabello; vitaminas y antioxidantes, que ayudan a combatir el daño celular y el envejecimiento prematuro; minerales esenciales, como el zinc y el silicio, que son fundamentales para la regeneración celular, e hidratación, que es clave para mantener una piel suave y un cabello hidratado desde la raíz", enumera esta experta.
En cuanto a los ingredientes para este caldo de belleza, Ana Luzón cuenta los componentes básicos que utiliza, así como las razones por las cuales son tan importantes.
"En primer lugar, huesos de calidad (de pollo o ternera) porque son una fuente natural de colágeno y gelatina, que favorecen la elasticidad de la piel y la estructura capilar. También aportan minerales como calcio, magnesio y fósforo", explica esta nutricionista. En seundo, verduras frescas. Por ejemplo, "la zanahoria es rica en betacarotenos, que mejoran el tono de la piel y combaten el daño solar; el Apio aporta silicio, importante para el crecimiento del cabello, la cebolla y el ajo son ricos en azufre, esencial para la formación de queratina, el componente principal del cabello, las espinacas o las acelgas son altas en hierro y vitamina C e ideales para evitar la caída del cabello".
En cuanto a las especias, y hierbas, Luzón recomienda incluir al caldo cúrcuma, que es un potente antioxidante y antiinflamatorio; jengibre, porque mejora la circulación, favoreciendo el aporte de nutrientes al cuero cabelludo, y así como perejil, que está cargado de vitamina C, antioxidantes y hierro.
Un cuarto ingrediente que debe tener tu caldo son las grasas saludables. "Una cucharada de aceite de oliva virgen extra o un puñado de semillas (como chía o lino) al final del caldo aportan ácidos grasos esenciales, necesarios para la hidratación de la piel y el cabello", añade Luzón. Y, finalmente, también ponle vinagre de manzana: "Añadir una cucharadita al caldo ayuda a extraer los minerales de los huesos y mejora la digestión, potenciando la absorción de nutrientes", concluye esta experta.
En cuanto a la receta, paso a paso, para realizarlo, Ana Luzón empieza por explicar los ingredientes para 4 o 5 porciones: "Un kilo de huesos de pollo o ternera de buena calidad, dos zanahorias grandes, dos ramas de apio, una cebolla, dos dientes de ajo, un trozo de jengibre (2 cm), una cucharadita de cúrcuma, dos litros de agua filtrada, una cucharadita de vinagre de manzana, perejil fresco al gusto y aceite de oliva virgen extra (es opcional, para servir).
La preparación es sencilla, prosigue esta nutricionista: "Enjuaga bien los huesos bajo agua fría. Después, coloca todos los ingredientes en una olla grande, cubre con agua y añade el vinagre de manzana. A continuación, lleva a ebullición y luego reduce a fuego lento. Cocina durante 6 a 8 horas (aunque si tienes una olla a presión, el tiempo se reduce a 1-2 horas). Posteriormente, cuela el caldo y desecha los sólidos y, finalmente, sirve caliente con un toque de aceite de oliva y perejil fresco".
¿Cuándo tomarlo? "Este caldo es perfecto para incluir en tu día a día", dice Luzón, "como primer plato en el almuerzo o la cena, como un snack calentito entre horas e incluso como base para sopas o guisos".
Los resultados que notarás si consumes este caldo con regularidad serán que "no sólo estarás nutriendo tu cabello y tu piel, sino también fortaleciendo tus uñas y articulaciones". "La clave está en la constancia y en combinarlo con una dieta variada y equilibrada. Recuerda, la belleza empieza desde dentro. Nutre tu cuerpo con los ingredientes adecuados, y verás cómo se refleja en tu apariencia", concluye esta experta.
