Qué se sabe de la viruela ovina, la enfermedad que ha puesto en cuarentena a miles de ovejas y cabras en Castilla-La Mancha
No hay riesgo directo para el ser humano.
La Junta de Castilla-La Mancha ha ordenado la puesta en cuarentena de todas las explotaciones ganaderas de cabras y ovejas en las provincias de Toledo, Cuenca, Albacete y Ciudad Real ante el avance de la viruela ovina.
Según adelanta El País, esta medida afecta a unas 6.000 ganaderías y una cifra de casi tres millones y medio de corderos y ovejas. Dentro de Castilla-La Mancha solo se escapa Guadalajara por su menor presencia ganadera.
Si bien solo se han detectado dos brotes, en Ciudad Real y Cuenca, se han sacrificado 40.000 animales, ante el riesgo de una posible transmisión comunitaria.
La Junta de Castilla-La Mancha ha remarcado que no hay riesgo para el ser humano, porque no es una enfermedad que se transmita de animales a personas. Al no ser "zoonótica", ha remarcado directora general de Agricultura, Cruz Ponce, no hay posibilidad de contagio a las personas”.
Sí podría darse el caso de que “uno sí que puede llevar el virus, por ejemplo, en la ropa y trasladarlo de una explotación a otra, pero no se puede contagiar”.
Aunque no hay un plazo temporal fijado, la cuarentena podría durar en torno a dos meses, según El País. "La idea es que los cebaderos terminen su ciclo de cebo hasta que sean llevados al matadero, para que se vacíen las explotaciones y poder desinfectar las instalaciones”, ha añadido la responsable del Gobierno este martes.
La medida incluye la prohibición de desplazamientos de animales entre explotaciones. Únicamente se permite su transporte al matadero. Sin embargo, la leche de las ovejas también podrá recogerse, en una medida planteada para intentar no dañar tanto uno de los grandes productos del mercado castellanomanchego, su queso.