La inyección de moda para adelgazar pone en jaque a los supermercados
Los tratamientos desarrollados para perder peso son cada vez más comunes entre las principales farmacéuticas.
No cabe duda de que uno de los principales problemas de nuestro tiempo es la alimentación. Los hábitos de vida, marcados por el estrés, el sedentarismo una dieta cada vez más inestable y menos sana, ha provocado que las tasas de sobrepeso y obesidad se hayan disparado hasta índices nunca antes imaginados.
Uno de los países en el que esté problema ha tomado tintes dramáticos es Estados Unidos. Según apunta el portal Trust for America's Health, a día de hoy, cerca del 40% de la población adulta y el 18,5% de los menores del país sufre de obesidad.
Este dato es especialmente crítico si se compara con la evolución del problema y es que, en apenas dos décadas, esta tasa se ha aumentado en un 30% en personas adultas y un 33% entre los menores.
Un problema global
Pese a que el país norteamericano es uno de los más afectados por este problema, no es el único, ya que se trata de un asunto que preocupa cada vez a más gobiernos y afecta a más países.
De hecho, un reciente estudio publicado por Atlas mundial, predice que la tasa de sobrepeso en el año 2035 afectará a más de la mitad de la población mundial (4.000 millones de personas), frente a los 2.600 que había en 2020.
Ante esto, muchas son las farmacéuticas que han desarrollado métodos, en forma de pastillas e inyecciones, para paliar y frenar los efectos de la obesidad, algunos de ellos ya se comercializan de forma generalizada en Estados Unidos.
Inyecciones contra la obesidad... y los supermercados
El producto 'estrella' que a día de hoy parece haber caído de pie en el país norteamericano es el Wegovy, de la farmacéutica Novo Nordisk. Este fármaco, que se suministra en forma de inyección reduce la posibilidad de padecer enfermedades cardíacas.
Se ha convertido en uno de los fármacos más utilizados en Estados Unidos con este objetivo, siendo incluso promocionado por personalidades y celebrities de todo tipo. El principal efecto de estas inyecciones es la pérdida de apetito, lo que se puede traducir en una reducción significativa de compras de alimento en los supermercados.
La inyección semanal con Wegovy tiene un efecto de saciedad en los pacientes durante más tiempo y ayuda a una pérdida de peso, de media, en torno al 15% siempre que se combine con una dieta para perder peso y se haga ejercicio.
Pero este no es el único fármaco con este objetivo y desde otras farmacéuticas como Pfizer o Amgen ya trabajan en terapias y fórmulas similares que reduzcan el peso. Los cálculos del mercado estiman a que esta industria puede tener un valor de hasta 100.000 millones de dólares a finales de la década.