Estas son las frases para identificar a una persona victimista según una psicóloga
Uno de los rasgos principales de una persona de estas características es que tienden a comunicarse de manera pasivo-agresiva.
En función del entorno y las vivencias, además de la cuestión genética, cada cual va desarrollando poco a poco su personalidad. Es por eso por lo que las personas son diversas y su forma de relacionarse y comunicarse con el resto es distinta. Al igual que hay algunos que son capaces de actuar asertivamente, los hay que no tanto. En este sentido, también hay personas que tienden a victimizarse.
Sobre ellas ha hablado la doctora especializada en biología y psicología Anna de Simone, que ha redactado un artículo para el portal dedicado a la segunda de las dos especialidades de la experta, PsicoAdvisor, en el que ha detallado una serie de frases que suelen decir las personas que suelen asumir ese rol de víctima.
Uno de los rasgos que ha destacado De Simone sobre las personas victimistas es que tienden a comunicarse pasivo-agresivamente. En este sentido, ha apuntado que tienden a decir las críticas, pero de forma indirecta. Uno de los ejemplos que ha señalado para aclarar su explicación es el siguiente: "Terminar tus estudios para una provinciana como tú debe haber sido una gran satisfacción".
"Tienes muy buena imaginación" o "tengo que tomar nota de tu perseverancia después de todos esos fracasos" son más frases que ha compilado la experta en su artículo, en el que concluye que son declaraciones "aparentemente inocentes", pero que "pueden esconder críticas sutiles".
La experta en psicología ha concluido que se suele tratar de personas que buscan transmitir un mensaje de carácter más bien negativo, pero sin querer responsabilizarse de la crítica. Pero los rasgos de una persona victimista, según Anna de Simone, también tienen que ver con la evasión de la responsabilidad.
"No hay nada que pueda hacer al respecto" o "quizá sea posible" son también frases propias de una persona como la que describe. La psicóloga ha señalado, además, el uso pasivo-agresivo del sarcasmo y la falta de habilidad para expresar sus peticiones de manera clara y concisa.