Cuatro años del estado de alarma: la pandemia que alteró la noción del tiempo de millones de personas
Tres psicólogos analizan los motivos por los que hay gente que sigue creyendo que no ha pasado tanto tiempo o que no dan crédito al ver las duras imágenes que se vivieron durante el confinamiento.
Todo el mundo tendrá en su memoria aquel momento protagonizado por Pedro Sánchez. Eran las 15:26 horas del 13 de marzo de 2020, un virus, el del covid, estaba dejando imágenes devastadoras en hospitales y centros de salud, y el presidente del Gobierno anunció, con un rostro muy serio, que decretaba el estado de alarma durante 15 días.
Esos 15 días se convirtieron en 58 y trastocó todos los planes de millones de personas en España. De esa medida de confinamiento se cumplen este jueves cuatro años y todavía sigue habiendo muchas cuestiones que la pandemia continúa planteando, aunque la situación haya cambiado por completo.
Una de esas preguntas que resultan recurrentes en estos días es la que mucha gente se repetirá en las próximas horas: '¿Han pasado ya cuatro años del estado de alarma?'.
El confinamiento domiciliario para hacer frente a la pandemia del covid hizo que muchas personas, de distintas generaciones, perdieran la noción del tiempo, dejando marcado el año 2020 para siempre en los calendarios emocionales de la gente.
No ha pasado tanto tiempo
Es un pensamiento que sigue ocurriendo. Hay personas que se sorprenden al parar en el tiempo y fijarse de que este jueves se celebra el cuarto aniversario del estado de alarma por la pandemia del covid.
Para muchos, 2020 fue hace poco tiempo, pero esto está relacionado de forma directa con la psicología de cada ciudadano. Miguel Ángel Rizaldos, psicólogo clínico con tres décadas de experiencia, reconoce que, durante esos meses, por razones lógicas, "se vieron muy reducidas las fuentes de satisfacción".
"Los días, semanas y meses pasaban de un modo muy anodino lo que puede dar la sensación de que no ha pasado el tiempo", reconoce, al contrario de lo que suele suceder cuando en un fin de semana se hace un viaje y "tenemos la sensación de que han sido más de 48 horas".
Arantxa Santos De la Rosa, psicóloga Sanitaria, CEPSICAP Psicólogos León, resalta que, en este caso concreto, "confluyen varios procesos". "Nuestra mente en ese momento, en 2020, estaba en modo supervivencia", explica.
"Otro proceso que puede explicarlo es que la mente humana tiene recursos para no estar en contacto con el sufrimiento, a través de mecanismos, por ejemplo, de memoria selectiva, tendiendo a recordar solo ciertos aspectos o más bien tendiendo a olvidar aquello que nos disgusta con cierta facilidad para preservar nuestro bienestar emocional", justifica.
Arantxa Santos hace hincapié en que esa reacción tiene que ver "fundamentalmente con procesos adaptativos y de supervivencia, con lo que somos como humanos". "Pensar que ha pasado tanto tiempo, y contactar con todo lo vivido, duele", añade.
Un punto de vista similar al de Enric Valls, psicólogo especialista en salud y educación. Reconoce que hay dos tipos de reacciones, las de los que piensan que ha fue hace mucho tiempo y los que consideran que "no ha pasado el tiempo".
El experto destaca que "no es un gran porcentaje de la población", pero hay quiénes lo siguen teniendo "muy presente" en su pensamiento, en gran parte, por los "miedos y temores" vividos.
La reacción al sufrimiento
Lo que ocurrió en aquellos días de la pandemia seguirá apareciendo en los libros de historia, pero hay muchos de esos sucesos, sobre todo, los que afectaban de forma personal, por la pérdida de familiares.
En los aniversarios, como el que se revive este jueves, hay gente que se para a pensar en lo que ocurrió y no da crédito a muchas de las cosas que vivieron en lo peor de la pandemia del covid.
Arantxa Santos cree que esto tiene que ver con el que ser humano actual tiende a funcionar "evitando el malestar de formas muy problemáticas, movidos por recompensas inmediatas y con mucha necesidad de bienestar a toda costa y para ello usamos mil y una estrategias".
Algo relacionado, de forma directa, con desconectar "de la realidad". "Tendemos a vivir en 'piloto automático', con la atención poco centrada en el presente y muy dispersa. En aquellos momentos del 2020, durante semanas, y meses se podría decir, la mayor parte de nosotros vivimos de una manera extraordinariamente repetitiva y rutinaria, muy alejada de lo habitual", razona.
Es algo que como psicóloga Sanitaria ve en el día a día con algunos pacientes. Cada vez tienen "menos consciencia de sí mismos, de sus vidas, de su conducta, del paso del tiempo". "No queriendo 'saber' nada de lo difícil que fue aquello. 'Ya bastantes vidas se perdieron', con lo que pasó... argumentan", apunta.
Enric Valls usa un término que fue protagonista durante aquellos días, el 'traumático'. Considera que esa reacción automática está relacionada con "una experiencia traumática personal durante la pandemia", aunque también puede ocurrir con la gente que es "muy analítica o reflexiva". "Personas que suelen querer tenerlo todo bajo control y eso generó malestar", justifica.
El psicólogo especialista en salud y educación considera que es un mecanismo de protección de la persona, "cuando vive esas escenas, son tan intensas y no esperadas, que la frase muy común que escucho en consulta es que se trata de una escena de terror o de ficción".
Es, precisamente, ese intento de tenerlo todo bajo control de lo que también habla Miguel Ángel Rizaldos para justificar esa reacción. "Nos cuesta retomarlo por no querer volver a sentir la incertidumbre y miedo que vivimos durante muchos meses", asegura.
"Nuestra mente tiende a no querer sentir incertidumbre, nos quiere dar la sensación de tener todo controlado para estar tranquilos algo que no es realmente así", expone.
El psicólogo clínico es sincero al destacar que lo que sufrió en aquellos momentos fue "un mazazo" para "esa intención de nuestro cerebro de tener control" y "de ahí que nos haga notar como si no hubiera existido".
Una especia de "trauma colectivo"
La memoria colectiva no olvida y parece que la pandemia del covid no se olvidará fácilmente. Arantxa Santos habla del "trauma colectivo" que el confinamiento y las consecuencias del covid causaron.
"Afectó de forma global a toda la población y aún sigue impactando. Por ejemplo, el virus sigue existiendo y se producen contagios, existe el fenómeno del covid persistente, hay familias que han sufrido pérdidas (muertes, pérdidas económicas, …) por el covid, y personas que, en definitiva, la pandemia ha supuesto un antes y un después en sus vidas", apunta.
En relación con estos recuerdos, Miguel Ángel Rizados explica que el ser humano "recuerda aquello que siente para bien o para mal". "Las emociones son que son el 'pegamento' de la memoria. Recordamos según sentimos, no según pasó", añade.
El psicólogo clínico advierte de que estos acontecimientos muy traumáticos "nos hicieron sentir emociones negativas como el miedo, la ira, la tristeza...". "Al recordarlos nos generan la sensación de que aconteció hace poco tiempo porque lo sentimos de una manera muy parecida, aunque haya pasado muchos años", expone.
Este jueves se cumple el cuarto aniversario del inicio del estado de alarma, pero la pandemia del covid seguirá estando en la retina de millones de personas por lo que se vivió durante aquellos días y por los efectos psicológicos y saludables que todavía siguen haciendo mella.