Consumo avisa sobre el efecto de las bebidas energéticas en jóvenes entre 11 y 17 años
No sólo por alteraciones en el sueño.
En los últimos días, los efectos de las bebidas energéticas han salido a la palestra después de conocerse que Galicia trabaja en una ley para prohibir su venta y consumo a los menores.
Este martes, Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), dependiente del Ministerio de Consumo, ha recordado que el consumo de más de 60 gramos de cafeína en adolescentes de 11 a 17 años "200 ml de bebida energética con 32 mg de cafeína/100ml" puede provocar "alteraciones del sueño".
No sólo eso, en otro mensaje ha insistido en que "a partir de 160 mg de cafeína (500 ml de una bebida energética con 32 mg de cafeína/100ml), puede haber efectos adversos generales para la salud: efectos psicológicos y alteraciones comportamentales y trastornos cardiovasculares".
En mayo de 2021 el Ministerio de Consumo ya alertó sobre la elevada ingesta de estos productos entre los más jóvenes: uno de cada cuatro niños entre 3 y 10 años las consume, la prevalencia entre los adultos es del 30% y entre los adolescentes aumenta hasta el 62% y en marzo del año pasado lanzó una serie de conclusiones sobre su consumo.
Por ejemplo, la AESAN avisó de que una lata de 250 ml puede aportar entre 27,5 y 30 gramos de azúcar, y una de medio litro, entre 55 y 60 gramos, más del límite recomendado por la OMS.
Recordó además que el consumo regular de cafeína puede causar "dependencia física moderada a partir de 100 mg/día, así como tolerancia a esta sustancia, lo que crea la necesidad de consumir una dosis mayor que la inicial para conseguir un efecto similar al original".
Advirtió también del peligro de tomarlas con alcohol: "Estudios recientes demuestran que el consumo de alcohol mezclado o en combinación con bebidas energéticas conduce a estados subjetivos alterados que, entre otros efectos, incluyen una disminución de la percepción de intoxicación etílica".