¿Cómo saber si tengo sarna? Síntomas y factores de contagio

La sarna es una afección cutánea que se produce por un ácaro, sarcoptes scabiei, que se introduce en el interior de la piel excavando túneles y se reproduce en su interior. Tal como explica la dermatóloga Elia Roó, se trata de una infección cada vez más frecuente últimamente debido a la resistencia al tratamiento habitual. “Se transmite por contacto directo, generalmente en el ámbito familiar, y también a través de ropa de cama o de tapicerías porque puede vivir fuera de los humanos dos o tres días”, apunta la doctora.

Síntomas de la sarna

El periodo de incubación de la sarna suele ser de tres a seis semanas. “La primera manifestación clínica es el picor, un picor muy intenso que se produce por la noche. Generalmente, desde el cuello hacia abajo, excepto en los lactantes, que pueden tener picor en el cuero cabelludo”, explica la especialista. “Además del picor, pueden aparecer pequeños granos entre los dedos, en las muñecas, en las axilas, en las áreas mamarias y en la región genital alrededor del ombligo”, añade.

Las lesiones pueden infectarse y extenderse, aunque no suelen afectar al cuero cabelludo en adultos. La dermatóloga aclara que se suele llegar al diagnóstico de sarna gracias a las características de ese picor y por las lesiones cutáneas. “A veces, se puede hacer un pequeño raspado de piel y observarla en el microscopio y también disponemos de la dermatoscopia, que nos puede ayudar para hacer un diagnóstico correcto”, explica la dermatóloga.

Consejos para tratar la sarna

A la hora de tratar la sarna, la dermatóloga Elia Roó aconseja que se trate toda la familia a la vez. También recomienda guardar la vestimenta, la ropa de cama y todo lo que haya podido estar en contacto con el ácaro en una bolsa cerrada y mantenerla así durante cinco o siete días. Otra posibilidad es lavarlo todo con agua caliente a más de cincuenta grados.