Advertencia médica por el papel de horno: revisa la etiqueta para descartar que sea tóxico o cancerígeno
Existen alternativas para evitarlo.
El papel de horno es un producto habitual en las cocinas de miles de casas españolas. Las hojas de este papel suelen utilizarse para colocar sobre las bandejas del horno para evitar que la comida se pegue a la bandeja o para que no haya un contacto directo con la misma.
Sin embargo, a pesar de su popularidad hay que tener cuidado puesto que algunos papeles puede contener sustancias tóxicas y potencialmente cancerígenas que es necesario evitar.
Concretamente, hay que prestar atención a los PFAS, químicos perfluoroalquilados y polifluoroalquilados que se utilizan para crear un efecto antiadherente. La Asociación Italiana de Médicos para el Medio Ambiente (ISDE Italia) ha advertido de que estos químicos pueden permanecer durante años en el organismo y ser altamente perjudiciales para la salud.
Según su investigación, recogida por el diario italiano Il fatto quotidiano, estos químicos podrían favorecer enfermedades hepáticas, del aparato reproductor, además de la aparición de algunos tumores.
“La mayoría del papel de hornear contiene PFAS. A la hora de comprar, es preferible elegir productos que indiquen su ausencia en la etiqueta. En general, es importante evitar superar las temperaturas recomendadas y reutilizar el papel de horno si ya ha estado expuesto a estrés térmico", ha explicado Francesco Romizi , responsable de comunicación y relaciones públicas de ISDE.
Otras alternativas son los papeles de horno ecológicos que no contienen este tipo de químicos o las planchas y bandejas de silicona que son cada vez más habituales. También se pueden recurrir a las pautas que se utilizaban tradicionalmente como aplicar un chorro de aceite o mantequilla para engrasar las bandejas del horno y evitar que se peguen los alimentos.