Los escenarios posibles para Daniel Sancho a unas horas de conocer su sentencia

Se acerca el momento. Apenas un año y casi un mes después, este jueves, día 29, se va a conocer la sentencia del caso Daniel Sancho. El texto está redactado desde hace días y el juez lo envió a una instancia superior para revisarlo el pasado 22 de agosto. La hora establecida para su lectura es las 10:00 de la mañana, hora local (3:00 GMT) —las 05:00 en España—. El lugar, el Tribunal Provincial de Samui.

El acto, según ha avanzado la agencia de noticias EFE, se podrá alargar hasta tres horas. Y, durante el mismo, únicamente va a hablar el juez, cuya identidad no ha trascendido en todo este proceso. Además del magistrado, se prevé que estén presentes el personal de la embajada española, los abogados de la defensa y los de la coacusación, el fiscal, los padres del acusado —Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo— además de Daniel. 

El joven acudió al juicio acusado de tres cargos: asesinato premeditado, destrucción de documentación ajena, y dañar y hacer desaparecer partes del cuerpo de la víctima. Este último está penado con hasta seis años de prisión.

En un principio, confesó el asesinato. Una vez concluida la investigación y con el informe entregado, el nieto de Sancho Gracia cambió su declaración y únicamente reconoce ser culpable del último de los tres cargos. Así lo ha mantenido a lo largo del juicio, que dio comienzo el pasado 9 de abril y se alargó hasta el 2 de mayo.

En esas cuatro semanas, defensa y acusación tuvieron sendos turnos para defender los intereses de sus respectivos clientes y el 1 de agosto el caso volvía a ser noticia. En esta ocasión, porque había culminado el plazo de tiempo que había fijado el juez para que defensa y Fiscalía presentaran sus alegatos finales.

Los abogados de Sancho cumplieron con la entrega. El ministerio público tailandés, no. Sin embargo, el fiscal del caso, Jeerawat Sawatdichai, explicó a la agencia de noticias EFE que este escrito "no tiene ningún impacto en la consideración del tribunal", dado que "la ley sólo tiene en cuenta las pruebas presentadas durante el juicio".

Uno de los aspectos que se van a conocer es la posible indemnización que deberá pagar Sancho a la familia Arrieta. En el transcurso del juicio hubo una discrepancia en este sentido entre el equipo de abogados españoles y tailandeses al frente de la acusación. Sin embargo, finalmente lo zanjaron con una solicitud de 30 millones de bat (lo que equivales a unos 790.000€). 

Pero este no es el único dato que se va a dar a conocer en la madrugada de este jueves. En función de la decisión que tome el juez, estos son los distintos escenarios en los que se podría ver en su futuro más inmediato Daniel Sancho.

Una primera opción: apelar

La primera opción a la que se puede suscribir el equipo de defensa es la de apelar la decisión del tribunal. Durante la lectura de la sentencia, quedará establecido un período de un mes para que cualquiera de las dos partes implicadas en este proceso puedan cuestionar alguno de los puntos del texto. 

Este proceso ya se lleva a cabo por escrito y sin necesidad de que el acusado se tenga que personar ante el juez en más ocasiones. Tampoco son necesarias más comparecencias ni que los testigos vuelvan a declarar. Ahora bien, hay sólo dos oportunidades. Primero, se puede emprender este trámite ante el Tribunal de Apelaciones y, después, ante el Supremo. Es un proceso que dura alrededor de un año. 

La máxima condena, la pena de muerte

El artículo 288 del Código Penal de Tailandia recoge que aquel que cometa un homicidio será condenado a pena de muerte o a prisión en un período de entre 15 a 20 años. En el siguiente artículo, el 289, compilan los distintos casos en los que se podría dar la pena capital. Precisamente, uno de los cargos a los que se enfrenta el joven de los Sancho se encuentra en esta lista, el de asesinato premeditado.

Sin embargo, según los datos de la Coalición Mundial contra la Pena de Muerte —actualizados en mayo del pasado 2023—, la última ejecución registrada en Tailandia sucedió en 2018 y se llevó a cabo con una inyección letal. De hecho, para este tipo de condenas, existe una forma de perdón que se puede solicitar al monarca tailandés, Maha Vajiralongkorn, y conmuta la pena de muerte por la cadena perpetua.

Esta es conocida como perdón real y consiste en escribir una misiva al soberano tailandés con motivo de su cumpleaños. En ella se ha de pedir al rey clemencia con el objetivo de que este conceda un indulto. En caso de ser esta la decisión final, los reos perdonados reciben un documento en prisión en el que se lo precisan.

Es lo que hizo el español Artur Segarra, que se encuentra cumpliendo este castigo en una prisión de Bangkok, después de que fuera condenado por delitos tanto de descuartizamiento como de asesinato al también español David Bernat, tal y como recoge Amnistía Internacional. Sucedió en 2016, pero las similitudes con el caso de Sancho han motivado que se vuelva a hablar de él.

El hecho de que su castigo pasara a ser la cadena perpetua abrió la posibilidad de poder dar, con el paso del tiempo, los primeros pasos hacia la extradición a España. Pero Segarra continúa cumpliendo condena en la capital de Tailandia.

De tres a 15 años de prisión

Si se determina que no hubo premeditación, Sancho no se enfrentaría ni a la pena capital ni a la cadena perpetua. El castigo pasaría a ser un período de tiempo en la cárcel. Y así queda recogido en el Artículo 290 del Código Penal tailandés. Este consta de dos partes.

Por un lado, recoge una pena de tres a 15 años para el que "sin intención de causarle la muerte, cause la muerte a otra persona causándole lesión en el cuerpo". Sin embargo, en caso de que se diera alguna de las circunstancias que recoge el artículo 289, el castigo de cárcel ascendería a un período de tres a 20 años.

Es precisamente en esta línea en la que fue la defensa de Daniel Sancho, tal y como explicaron sus abogados, Carmen Balfagón y Marcos García Montes, en la rueda de prensa que convocaron a principios de 2024. Durante la misma, hicieron hincapié en esta diferencia en entre un castigo y el otro, tal y como queda recogido en el Código Penal .

Asimismo, Balfagón apuntó que el acusado "nunca confesó que había matado a Edwin Arrieta", a pesar de que en un primer momento se personó en comisaría reconociendo la autoría de lo sucedido. "Solo confesó, y por eso colaboró, que lo había desmembrado", precisó la letrada.

Si la pena supera los 15 años, cambio de prisión

Ahora bien, en caso de que el castigo que se le imponga suponga más de 15 años en prisión, se producirían algunos cambios. Sancho deberá ser trasladado del centro en el que se encuentra actualmente, la cárcel de Samui, a la prisión de Surat Thani. Así lo ha apuntado, en declaraciones para EFE, el fiscal del caso, Jeerawat Sawatdichai. Este, además, ha precisado que ese cambio no sería inmediato. Todo dependería de "cómo se desarrollen los trámites de la prisión".

Pero si la pena fuera superior a los 25 años, habría un cambio a otra cárcel. El ya citado fiscal ha indicado a la agencia de noticias que, en ese caso, Sancho sería trasladado a la prisión de Nakhon Si Thammarat, también al sur de Tailandia, como la de Surat Thani. 

Un acuerdo entre España y Tailandia

En caso de que la decisión del juez sea mandar a Sancho a prisión, existe la posibilidad de que cumpla una parte de su condena en España. Así quedó recogido en el acuerdo que firmaron en diciembre de 1983 Madrid y Bangkok sobre cooperación en materia de ejecución de sentencias penales en el que, además, ambos estados dejaron también por escrito las condiciones para cumplir este trato. Una de ellas es que los estados reconozcan como delito el motivo por el que la persona en cuestión haya sido procesado.

Otra tiene que ver con el tiempo al que sea condenado. Según explicó el experto en derecho penal internacional, Jesús Salmerón, a El Confidencial, el acusado primero debe permanecer un mínimo de ocho años en el país que le han condenado. En este caso, Tailandia. Si una vez culminado este período, todavía le queda más de un año de cárcel, podrían emprender los trámites para solicitar el traslado.

El texto que firmaron hace más de 40 años, publicado en el BOE, recoge que en casos de pena de prisión perpetua, también se puede proceder al desplazamiento. Y lo mismo pasa con aquellas penas en las que la fecha del final de la misma ya está concretada.

El procedimiento que acordaron en 1983 España y Tailandia para ello es el siguiente. En primer lugar, el reo ha de conocer la existencia de este pacto, la posibilidad de que se aplique y las condiciones del mismo. Una vez se decida empezar el trámite, ha de hacerse por la vía diplomática, "mediante una petición escrita dirigida por el estado receptor al estado trasladante", dice el acuerdo.

En el caso de Sancho, tendrían que ser las autoridades españolas las que solicitaran el cambio. Si Tailandia diera el visto bueno, en este supuesto, lo que debería de hacer sería informar a España de ello y comenzar el procedimiento pertinente para hacer el desplazamiento. En las inmediaciones del mismo, las autoridades tailandesas podrían comprobar, si quisieran, el traslado.

Este, acordaron ambos países, se debería hacer teniendo en cuenta dos aspectos. El primero de ellos es que "pueda contribuir a su reinserción social o redunde, en todo caso, en su interés". El segundo es atender a la "naturaleza y gravedad del delito, especialmente los efectos de este en el estado receptor y en el estado trasladante, así como las circunstancias atenuantes o agravantes".

Esta vía es, según afirmó en junio García Montes, la que confían los abogados de la familia Sancho que van a tomar. Así lo explicó después de llegar a un acuerdo en otro juicio que Daniel tenía pendiente en Madrid, en esta ocasión por agredir a un hombre en una calle de la capital en 2019.

Este confió en que, tras haber sido juzgado en Tailandia, condenen a su defendido por homicidio imprudente grave, lo que tendría un pena de 8 años de cárcel, o un homicidio imprudente menos grave, que serían 6 años. Además, apuntó que tanto en el proceso que tenía pendiente en España, como en el de Tailandia, "las cosas no son tan graves como parece que todo el mundo entiende". En cualquier caso, el futuro más inmediato de Sancho está ahora en manos de la justicia tailandesa.