Más Democracia, Más Andalucía
El 4D de 1977, Andalucía reivindicó su nacionalidad y así se recogió en la Constitución, y fue gracias a ese impulso popular que el 28F de 1980 accedió a una autonomía plena, aunque tuviese que ir a través del infame procedimiento establecido en el articulo 151.
Captura de pantalla de una de las manifestaciones que se celebró el 4 de diciembre de 1977 en Andalucía
Cuatro de diciembre, domingo por la mañana del año 1977, Andalucía se manifestó para reivindicarse como nacionalidad histórica, un año antes de que se aprobase la Constitución Española.
La bandera blanca y verde estaba en todas partes, cubría las paredes de las calles, se exhibía en los coches, en los calendarios y hasta en los relojes de pulsera. Las niñas y niños aprendíamos el himno de Andalucía en los colegios y ya sabíamos quién era Blas Infante, pues el profesorado también se sentía andaluz.
Hace cuarenta años sabíamos bien que una manifestación implicaba carga policial pero aquella mañana del 4D en Jerez de la Frontera, y en cada una de los pueblos y ciudades andaluzas, millones de andaluzas y andaluces salieron a la calle. Y salieron sin miedo, dejándonos a los niños y niñas en casa por lo que pudiese pasar, para que en la próxima Constitución, Andalucía pudiese acceder a la autonomía como el resto de las nacionalidades históricas.
El 4D Andalucía reivindicó su nacionalidad, y así se recogió en la Constitución, y fue gracias a ese impulso popular que el 28F de 1980 accedió a una autonomía plena, aunque tuviese que ir a través del infame procedimiento establecido en el articulo 151.
En aquellos días ser andaluz era sinónimo de activismo democrático y déjenme decirlo: ser andaluz era ser moderno. Cuarenta años después sigo siendo andaluz y me resisto a entrar en un post o meta modernismo político donde todo cabe y casi nada vale.
Por suerte, somos muchas y muchos que aún sentimos que nuestra lucha es moderna, es actual. Sin ir mas lejos, ayer regresé de Cordoba, donde asistí al XXVI Feminario de la Plataforma Andaluza de apoyo al Lobby Europeo de mujeres. Cita de lo mas granado del feminismo español que Andalucía convoca cada año, y una fuente de inspiración e ideas para seguir mejorando esta España que nos toca. Pero sobre todo, fue un placer compartir un espacio progresista desde donde reivindicar y seguir articulando la lucha por la Igualdad como movimiento político moderno y transversal, como moderno y transversal es también nuestro andalucismo.
Así pues, y como se refleja en el Manifiesto 4+15, Más Democracia, Más Andalucía constitucionalmente hablando hay que decir lo siguiente:
Yo he firmado este manifiesto con la esperanza de que Andalucía tenga voz en el Parlamento que nos quede tras el 20D. Y que su voz se exprese en el mismo régimen de igualdad que el resto de las nacionalidades históricas.
Pero sobre todo, he firmado porque es necesario reivindicar nuestra andalucidad desde una perspectiva no sólo política sino filosófica y cultural que siga conformando la utopía en que muchas y muchos creemos. Y para ello hay que reivindicar una democracia mas participativa y que reivindique la igualdad como valor fundamental, conquistando las plazas y las calles desde los ayuntamientos de nuestras ciudades, como se viene reivindicando desde el 15M.