Una carambola termina con un lote de armas occidentales para Marruecos
Todo se fraguó recién iniciada la guerra de Ucrania.
La guerra de Ucrania tiene múltiples consecuencias globales y una de las más significativas es la del armamento que envían y reciben con motivo del conflicto armado los diferentes países que conforman el planeta.
Se trata de algo que no únicamente afecta a los aliados declarados de Ucrania o de Rusia, sino también a países que tratan de mantener una posición neutral ante la contienda que está teniendo lugar en territorio ucraniano.
Tal y como recoge El Confidencial, es lo que ha ocurrido con Marruecos, que en una carambola habría recibido un lote de armas occidentales. Todo se remonta al año 2021, cuando el país norteafricano firmó un contrato con la compañía checa de armamento Excalibur Army para actualizar sus tanques de construcción soviética T-72B al estándar T-72M.
Sin embargo, de los 130 carros de combate enviados a República Checa, menos de la mitad habrían regresado a Marruecos. De ese número restante de tanques, al menos una veintena habrían sido enviados a Ucrania y los demás, 74, se encontraría todavía en los talleres checos para ser enviados a territorio ucraniano cuando estén preparados.
La Unión Europea tildó de “absolutamente irresponsable” que Rusia haya considerado el envío como una provocación de Estados Unidos y la OTAN.
Ese movimiento se habría acordado en la primera cumbre del Grupo de Contacto para la Defensa de Ucrania, que tuvo lugar el 26 de abril de 2022, dos meses después de que la guerra comenzara.
En ese momento, Occidente buscaba desesperadamente reforzar a Ucrania con material militar de fabricación soviética por dos motivos: que Rusia no entendiera el envío de equipos occidentales como una provocación (una teórica línea roja que con el paso del tiempo fue sobrepasada) y que las fuerzas ucranianas supieran utilizar el armamento.
En consecuencia, Estados Unidos habría presionado con insistencia a Marruecos para que cediera a Ucrania algunos de esos tanques T-72B que estaba actualizando en República Checa. Como compensación a esa ayuda a Ucrania, el país norteafricano habría recibido tanques Merkava Mk2 y Mk3.
