Un yacimiento sorprende a Albania
"La gran promesa de la extracción de una riqueza considerable".
El Gobierno albanés ha anunciado un descubrimiento clave para la economía del país y de gran relevancia en el plano del mercado internacional. El 'oro negro' podría volver a fluir con fuerza en un país con un gran pasado de dependencia de este recurso natural. Se trata del hallazgo de un importante yacimiento de gas y petróleo en el sur del país por parte de la multinacional energética Shell.
"El importante descubrimiento hoy en Shpirag a 6,1 kilómetros de profundidad de petróleo supone la gran promesa de la extracción de una riqueza considerable para Albania y los albaneses...", escribió en su cuenta de Facebook el primer ministro albanés, Edi Rama.
Shell lleva diez años realizando prospecciones en la zona de Shpirag, cerca de la ciudad turística de Berat. Rama indicó que habrá que esperar hasta finales de año para tener más detalles sobre esta reserva y la posibilidad de extraer los hidrocarburos.
El jefe del Gobierno añadió que se está trabajando para crear un fondo soberano para, en caso de que se confirme el hallazgo, gestionar los recursos que genere el petróleo, siguiendo el modelo de países como Noruega, Arabia Saudí y Azerbayán. Se estima que en los últimos diez años Albania extrae un millón de toneladas de petróleo al año, frente a los 2,5 que se extraían en la década de 1970, durante la dictadura comunista.
Tras el comunismo: un sector privatizado en el que China parte el pastel
Casi el 90% del petróleo lo extrae la empresa china Bankers Petroleum Albania, que explota el mayor yacimiento petrolífero del país, el de Patos-Marinza, y el resto lo bombean varias empresas menores, entre ellas la estatal Albpetrol. Albania exporta la mayor parte del petróleo que extrae y debe importar tanto crudo como sus derivados, ya que la principal refinería del país dejó de funcionar en 2019.
El 98% de la producción energética de Albania proviene de las centrales hidroeléctricas construidas en la época comunista y el país carece de conexiones internacionales de gasoductos. Tras la llegada de la democracia hace 30 años, el sector energético fue sometido a privatizaciones, en muchos casos abusivas, que se considera perjudicaron al que era uno de los sectores más desarrollados durante la dictadura.