Ucrania se atasca en sus campos de cultivo
El Ministerio de Defensa de Reino Unido, en su informe diario de la guerra, da cuenta de los problemas que la maleza supone para el desarrollo de la ofensiva de Kiev.
El Ministerio de Defensa de Reino Unido publica cada día un parte de la guerra de Ucrania que es seguido con lupa, por su fiabilidad, por toda la comunidad internacional. Este 3 de agosto, se centra en un flanco poco tratado hasta ahora: cómo el campo y sus yerbas pueden afectar también a la evolución de la reconquista, la ofensiva con la que Kiev pretende recuperar esa quinta parte de país que tiene ocupada por Rusia en este momento.
Según los expertos de Londres, "la maleza que vuelve a crecer en los campos de batalla del sur de Ucrania es probablemente un factor que contribuye al progreso generalmente lento del combate en el área". Afina que "la tierra predominantemente cultivable en la zona de combate ahora se ha dejado en barbecho durante 18 meses, con el regreso de malezas y arbustos acelerándose bajo las condiciones cálidas y húmedas del verano".
"La cobertura adicional ayuda a camuflar las posiciones defensivas rusas y hace que los campos minados defensivos sean más difíciles de despejar", indica Reino Unido, además. Así que el problema es para la propia producción agrícola, cuando Ucrania se ha llamado siempre "el granero del mundo", y a la evolución de la guerra, facilitando las artimañas del enemigo, cuando precisamente es más fácil defenderse que atacar y cuando las defensas colocadas por los rusos estaban siendo ya, sin maleza, muy complicadas de sortear.
Sin embargo, sostiene que el terreno acaba siendo un problema, en estas circunstancias, para todo: "Aunque la maleza también puede proporcionar cobertura para pequeños asaltos sigilosos de infantería, el efecto neto ha sido dificultar el avance de cualquiera de los bandos". Y es que, como cuando el suelo estaba embarrado y no había manera de avanzar, en invierno, ahora también la tierra pone sus condiciones.