Rusia revela su nuevo sistema de misiles avanzados con los que planea desestabilizar la seguridad global
El Kremlin no teme intensificar la ofensiva si siente que sus intereses están amenazados.
El general Serguéi Karakaev, comandante de las Fuerzas de Misiles Estratégicos (FMS), ha afirmado que Rusia está desarrollando nuevos sistemas de misiles que están a la altura de los planeadores nucleares Avangard y los misiles hipersónicos Oreshnik existentes, según ha informado el medio Natural News.
Las declaraciones de Karakaev se producen en el contexto de los continuos esfuerzos de Rusia por reforzar sus fuerzas de disuasión con los misiles balísticos intercontinentales Yars (ICBM) y el RS-28 Sarmat, que sustituirá al RS-20V Voevoda. El Sarmat, actualmente en servicio, cuenta con un alcance tan amplio que puede llegar a Estados Unidos a través del Polo Sur, lo que hace casi imposible que los sistemas antimisiles balísticos (ABM) estadounidenses lo intercepten.
Rusia, además, está trabajando en el sistema de misiles "Osina", junto con otros sistemas estratégicos que el Kremlin aún no ha revelado. Estos sistemas están equipados con ojivas avanzadas que pueden resistir incluso las defensas más sofisticadas. "No hay ningún lugar en términos de alcance que nuestros misiles no puedan alcanzar ", declaró Karakaev.
Con esta nueva gama de misiles, Rusia amenaza con reanudar la carrera armamentística y desestabilizar la seguridad mundial. En este contexto, la OTAN está ampliando sus ambiciones estratégicas hacia las fronteras de Rusia.
El despliegue de sistemas de misiles estadounidenses en Rumania y Polonia ha sido un punto especialmente delicado para Moscú, que considera la medida como una amenaza directa a su seguridad. Karakaev fue inequívoco en su respuesta: "Estas bases de misiles no suponen una amenaza significativa para nuestras capacidades hipersónicas".
El Kremlin no teme intensificar la ofensiva si siente que sus intereses están amenazados. Karakaev incluso insinuó la posibilidad de aumentar el número de ojivas en los misiles desplegados después de que expire el nuevo tratado START en 2026. Esta medida anularía efectivamente el acuerdo de control de armamentos que ha sido una piedra angular de la seguridad internacional durante décadas.