Rusia encuentra un país para 'colar' el rublo
Este giro en sus relaciones internacionales puede servir al Kremlin de salvavidas.
Rusia sigue explorando opciones para intentar llevar a cabo su idea de expandir el rublo por el mundo, es decir, que otros países permitan realizar transacciones con la moneda rusa, gravemente dañada y devaluada -el dólar está a 80 rublos- debido al conflicto con Ucrania.
En este sentido, las posibilidades de Rusia pasan por implantar políticas aperturistas con países afines y que históricamente hayan sido aliados, como es el caso de China, con el que actualmente mantiene una fantástica relación o países sudamericanos.
Con este objetivo, su Ministro de Exteriores realizó una gira por los principales países de Sudamérica hace un par de meses, para tratar de establecer alianzas e intentar llegar a acuerdos comerciales que puedan reportarle beneficios a todos los niveles.
Cuba, una aliada histórica
Uno de los países con los que durante el último siglo ha mantenido una fuerte y duradera amistad ha sido la isla de Cuba, cuyo puto de encuentro más evidente es el fuerte antiimperialismo estadounidense que comparten.
Como consecuencia, ahora Rusia, en una posición muy desfavorable está tratando de que el país centroamericano pueda servirle de aliado para dar salida al rublo ruso, una opción que La Habana parece haber aceptado de buen grado.
Por ello, tres bancos rusos ya han abierto sucursales en territorio cubano y han presentado la documentación necesaria al Banco Central de Cuba (BCC) para llevarlo a cabo, según informó Boris Titov comisionado presidencial para los Derechos de los Empresarios de Rusia.
De hecho, en el mes de marzo, los cajeros automáticos de Cuba comenzaron a aceptar las tarjetas del sistema ruso MIR para retirar efectiva de tarjetas rusas, algo que ya ocurre en paises como Vietnam, Corea del Sur, Armenia, Bielorrusia, Kazajistán, Tayikistáno Kirguistán.
¿Qué es el MIR?
Este sistema MIR fue planeado en 2014 por el Banco Central Ruso cuando el Kremlin fue sancionado por primera vez por Occidente tras sus intentos de incorporar Crimea a sus fronteras.
Este nuevo modelo surgió cuando las compañías como Visa y MasterCard restringieron las operaciones con algunos bancos rusos, por lo que la única alternativa posible para mantener un sistema financiero estable era este, por lo que en 2015 comenzaron a emitirse las tarjetas.
Tras este último acuerdo, el vicepresidente ruso, Dmitri Chernyshenko afirmó que esperan que "en un futuro muy cercano, con las tarjetas rusas se pueda pagar en tiendas, cafés y restaurantes" de Cuba.
La situación crítica de Cuba
Esta medida supone también un insuflo de aire fresco para Cuba, ya que en los últimos años, su moneda se ha devaluado a niveles históricos, convirtiéndose en la cuarta moneda más devaluada del planeta, solo por detrás del dólar de Zimbawe, el bolívar venelozano y la libra libanesa, según el Currency Watchlist.
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel fue el primero en reconocer los problemas que esto está acarreando a la economía cubana y su impacto en el día a día de sus ciudadanos: "Nos está costando más trabajo adquirir en tiempo los alimentos de la canasta, y tenemos una canasta montada sobre la base de la importación", aseguró a medios del país.
Y es que, Cuba importa alrededor del 80% de la comida consumida en el país, un factor que, sumado a la inflación interanual del 75% -a marzo de 2023- suponen una quimera para cualquier tipo de medida que promueva la producción nacional.