Putin ordena a sus científicos salvar 175.000 vidas con el nuevo tratamiento contra el envejecimiento

Una de las últimas órdenes del mandatario ruso, Vladímir Putin, pasaría literalmente por reclamarle a sus científicos y médicos que busquen una suerte de cura contra la vejez. Concretamente, un tratamiento que contribuya a aumentar la esperanza media de vida de su ciudadanía ante la drástica caída cosechada en solo un año.

Y ese tratamiento viene acompañado de cifras. Para el horizonte de 2030, la meta está en "salvar 175.000 vidas". Este es el resultado de lo que ha desvelado una investigación de la que se hace eco Newsweek.

Todo parte de un anuncio conocido que el propio Putin expuso entre los objetivos para su actual mandato. Se refirió a la meta de aumentar la esperanza de vida del país a 78 años para 2030 y a 81 años para 2036, mediante la vía incluso de un "rápido crecimiento de la esperanza de vida saludable". 

"Nos pidieron que enviáramos urgentemente todos nuestros avances..."

En parte, los últimos datos del Servicio Federal de Estadísticas del Estado de Rusia (Rosstat) explicaban ese eje político. Entre julio de 2023 y junio de 2024, la esperanza de vida media se desplomó a 73,24 años. Es la misma tasa que tenía Rusia en 2017. "Nos pidieron que enviáramos urgentemente todos nuestros avances y la carta llegó, digamos, hoy, pero todo tenía que haber sido enviado ayer", aseguró un médico ruso cunado recibió la carta en junio.

"Para ser sincero, es la primera vez en mi vida que me encuentro con algo así: normalmente, cualquier proyecto nacional o FTP [programa de objetivos federales] va precedido de una serie de reuniones con la participación de varios especialistas, algún tipo de debate público", concretó el mismo profesional.

¿En qué consisten las investigaciones que quiere el Kremlin?

Según la citada información, el Departamento de Ciencia y Desarrollo Innovador de la Atención Sanitaria del Ministerio de Salud de Rusia reclamó, a través de misiva, que los médicos de los institutos de investigación rusos presentasen con urgencia sus propuestas y trabajos que se encaminasen en la dirección de preservar la salud de los ciudadanos rusos.

En esas cartas se concretaba que englobaba a todas aquellas investigaciones relacionadas con el desarrollo de productos médicos "destinados a reducir la carga del envejecimiento celular" y con "la evaluación de la edad biológica utilizando varios métodos". Por ejemplo, tratamientos para combatir la sarcopenia, la astenia senil y la osteoporosis.

No solo eso. También todo lo relacionado con "nuevas neurotecnologías y productos médicos relacionados destinados, entre otras cosas, a la prevención y el desarrollo de trastornos cognitivos y sensoriales" o "métodos para corregir el sistema inmunológico basándose en sus indicadores críticos identificados en el envejecimiento" y "nuevos métodos de tecnologías médicas (incluidos dispositivos médicos) basados en la tecnología de bioimpresión".