Putin autorizó el misil que derribó el avión de Malaysia Airlines MH17 en Ucrania
En la tragedia, ocurrida en 2014, fallecieron 298 personas.
Novedades en el caso del avión de Malaysia Airlines MH17 que fue derribado en Ucrania en el año 2014. El presidente ruso, Vladímir Putin, fue quien autorizó el despliegue en el este de Ucrania de sistemas de defensa aérea que incluyeron el lanzamisiles BUK que atacó la citada aeronave, según “fuertes indicios” publicados por el equipo internacional (JIT) que investiga esa tragedia.
“Hay fuertes indicios de que en Rusia la decisión ha sido tomada por el presidente sobre la provisión del sistema de misiles BUK a los separatistas de la autoproclamada R.P. de Donetsk (RPD)”, resalta el JIT, cuya conclusión se basa en documentos oficiales y conversaciones interceptadas en los días previos a la tragedia del MH17, que dejó 298 muertos.
Además, tal y como recoge EFE, el JIT señala que “después de que los separatistas solicitaran armas antiaéreas de mayor alcance, su solicitud se discutió en la Administración Presidencial en Moscú en la segunda quincena de junio de 2014".
En ese sentido, el JIT asegura que “hay información concreta” de que se presentó “la petición de los separatistas al presidente”, aunque “se desconoce si mencionaba explícitamente un sistema BUK”. Lo que sí está claro es que la decisión “fue positiva” y “poco después, se entregan los sistemas pesados de defensa aérea, incluido el BUK que luego derribó el MH17”, aclara el equipo internacional.
No hay pruebas suficientes para iniciar una demanda judicial
Por otro lado, las conversaciones interceptadas también ofrecen información sobre los miembros de la tripulación que operó la instalación del sistema de misiles en cuestión, pero el JIT lamenta que las autoridades rusas “no están respondiendo preguntas sobre la tripulación, diciendo que no había ningún sistema de misiles BUK ruso presente” en el este de Ucrania.
En cualquier caso, y a pesar de la información nueva sobre la identidad de “varias personas involucradas” en lo ocurrido, en este momento, hay muy pocas pruebas para iniciar una demanda judicial. Los motivos son varios: Moscú se niega a cooperar, los testigos temen por su vida si testifican y el propio Vladímir Putin cuenta con inmunidad presidencial.
El JIT, a su vez, apunta que esta situación obliga a suspender las pesquisas temporalmente, pero no cierra el caso. El equipo internacional que está investigando la tragedia del MH17 está compuesto por autoridades de Australia, Bélgica, Malasia, Países Bajos y Ucrania.