El periodista y Premio Pulitzer Seymour Hersh acusa a EEUU de estar tras el sabotaje al Nord Stream
Asegura que buzos de la Marina aprovecharon unas maniobras de la OTAN en el Báltico para colocar explosivos en los oleoductos y Noruega los hizo detonar.
El periodista y ganador de un premio Pulitzer Seymour Hersh ha acusado a la Marina de Estados Unidos de estar detrás de las explosiones registradas en los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2 en septiembre de 2022.
Hersh ha explicado en su página web que los responsables del supuesto sabotaje son buzos de la Marina estadounidense, que habrían colocado explosivos durante las maniobras Baltops 22 de la OTAN. A continuación, ha acusado a las autoridades noruegas de activar dichas cargas, meses después. "Tres meses después destruyeron tres de los cuatro ramales del gasoducto", ha indicado en su página web.
Según el periodista, el 26 de septiembre, un avión de la Marina noruega lanzó una boya hidroacústica que detonó los artefactos explosivos. Así, ha explicado que la decisión de hacerlos estallar se tomó nueve meses después de un "debate secreto" por parte de las agencias de seguridad nacional estadounidense.
"Durante la mayoría de ese tiempo, el conflicto no estaba en hacer la misión, sino en cómo llevarla a cabo sin clave evidente de quién había sido responsable", aseveró. Además, por lo que se pensó en este equipo de buzos es especialmente porque sus actividades no están bajo el escrutinio presupuestal del Poder Legislativo del país norteamericano.
Hersh, que ganó el Pulitzer en 1970 por su trabajo sobre la masacre de My Lai a manos de una unidad militar del Ejército de Estados Unidos durante la Guerra de Vietnam, ha aseverado que, no obstante, la Casa Blanca tachó estas acusaciones de "falsas" y "totalmente ficticias".
De momento, sus revelaciones están teniendo un enorme impacto en las redes sociales, donde se reclaman explicaciones a Washington y a los países europeos que hayan estado involucrados o afectados por este suceso.
Los hechos
El pasado 26 de septiembre, Nord Stream 2 AG, operadora del gasoducto homónimo ruso, anunció una fuga de gas por causas desconocidas en una de las dos tuberías de la infraestructura cerca de la isla danesa de Bornholm.
Posteriormente, las autoridades informaban de que dos ramales del gasoducto paralelo Nord Stream 1 también habían sufrido daños. Alemania, Dinamarca y Suecia no descartaron un acto de sabotaje tan solo ocho meses después del inicio de la invasión rusa de Ucrania.
El Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia catalogó las explosiones de ataques terroristas y el 30 de septiembre desveló que tenía pruebas que apuntaban a la implicación de países occidentales.
La reacción de Rusia: terrorismo y Tercer Reich
El presidente de la Duma Estatal de Rusia, la Cámara Baja del Parlamento ruso, Viacheslav Volodin, ha pedido una investigación internacional para investigar esta información. "Los hechos publicados deberían convertirse en la base de una investigación internacional, llevar a Biden y sus cómplices ante la Justicia, así como pagar indemnizaciones a los países afectados por el ataque terrorista", ha aseverado en un mensaje publicado en su cuenta de Telegram.
El presidente de la Cámara Baja rusa repite que si es cierta la versión de los buzos estadounidenses "bajo el amparo de la OTAN y con el apoyo de Noruega", estamos ante una estrategia -afirma- que "recuerda" al Tercer Reich alemán.
Volodin ha comparado a Biden con el expresidente de EEUU Harry Truman: "Si Truman se convirtió en un criminal que usó armas atómicas contra civiles en Hiroshima y Nagasaki, entonces Biden se convirtió en un terrorista que ordenó la destrucción de la infraestructura energética de sus socios estratégicos".
El desmentido de EEUU y el viejo aviso de Biden
La Casa Blanca ha desmentido las acusaciones del periodista, reiterando que "no estuvo involucrado en la explosión". El Departamento de Defensa ha asegurado que la Marina de Estados Unidos no está involucrada en el incidente, según ha informado The New York Post.
"Estados Unidos no estuvo involucrado en la explosión de Nord Stream", ha afirmado en un breve comunicado el portavoz del Pentágono Garron Garn al citado diario, reiterando la respuesta que el Departamento de Defensa hizo sobre la misma acusación en octubre. Entonces, el propio presidente ruso, Vladimir Putin, señaló en un discurso: “Las sanciones no han sido suficientes para los anglosajones, pues han comenzado a realizar sabotajes. Cuesta creer que sea un hecho que [EEUU y sus aliados] hayan planificado la explosión de los gasoductos internacionales Nord Stream que recorren el fondo del Mar Báltico. [Ellos] empezaron a destruir la infraestructura energética paneuropea. Todos sabemos muy bien quiénes se benefician de esto. Por supuesto que quienes se benefician son quienes lo hicieron”.
Una idea reforzada por el embajador ruso ante la ONU, Vassily Nebenzia, quien acusó a EEUU de haber volado la infraestructura "porque no tenía suficiente con las sanciones", en plena sesión del Consejo de Seguridad. Y el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo también que EEUU había aumentado los precios y las ventas de gas natural licuado tras las fugas de gas, que era el primer beneficiario del problema. Se sumaron otras voces, como la de Jeffrey Sachs, exconsejero de Naciones Unidas, que afirmó: "Apuesto a que la explosión fue una acción de Estados Unidos, tal vez de Estados Unidos y Polonia".
Fueron días, como ahora, en los que se sacaron a relucir declaraciones viejas de Biden en las que avisó de que que el polémico gasoducto se detendría si Putin ordenaba una invasión de Ucrania. Estábamos entonces a 8 de febrero de 2022 y la guerra comenzó el 24. "Le pondremos fin", aseveró el jefe del Ejecutivo norteamericano en una rueda de prensa conjunta en la Casa Blanca con el canciller alemán, Olaf Scholz. "La idea de que Nord Stream 2 va a seguir adelante con una invasión de los rusos... Eso no va a ocurrir", añadió Biden, según informó Bloomberg.
Un periodista de la agencia Reuters insistió en la cuestión: "¿Cómo lo harán exactamente, ya que el proyecto y el control del mismo están en manos de Alemania?", preguntó al presidente de EEUU. "Lo haremos, se lo prometo, podremos hacerlo", se limitó a responder Biden.
Dos días antes del inicio de la invasión, el canciller alemán bloqueó la certificación del gasoducto Nord Stream 2 como respuesta a la iniciativa rusa de reconocer a los territorios separatistas prorrusos de Ucrania, Donetsk y Lugansk. EEUU ha defendido posteriormente que a ese tipo de parada se refería el presidente, a pararlo desde la acción política, pero sus declaraciones sirven de carbón para la locomotora de sus críticos, especialmente de los medios prorrusos.