Los nuevos mini drones de Ucrania se quedan cortos
No pueden suplir las capacidades estratégicas de los misiles de crucero Taurus que pedía Zelenski.
El ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius, anunció el lunes que Alemania enviará a Ucrania 4.000 drones de ataque de fabricación alemana controlados por inteligencia artificial, que supondrán para las fuerzas armadas ucranianas "un activo más realmente importante, especialmente cuando se trata de atacar cadenas logísticas y puestos de mando en el interior".
Pistorius precisó que estos drones, conocidos como Mini-Taurus, pueden adentrarse entre 30 y 40 kilómetros para atacar puestos de mando, nodos logísticos y otros y, en particular, "tienen la capacidad de socavar las defensas electrónicas del enemigo para, por así decirlo, alcanzar aún así el objetivo".
Desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, Alemania ha sido un aliado clave para Ucrania, suministrándole una amplia gama de ayuda militar y financiera. Entre sus contribuciones se incluyen sistemas de defensa aérea como los Patriot, capaces de interceptar misiles balísticos y de crucero.
Limitaciones de los Mini-Taurus
Sin embargo, se ha mostrado reacia a entregar misiles de largo alcance Taurus, que permitirían a Ucrania golpear objetivos estratégicos a más de 500 kilómetros detrás de las líneas enemigas. Y pese a que los Mini-Taurus pueden ser de mucha ayuda, estos dispositivos no sustituyen las capacidades estratégicas de los misiles de crucero Taurus, informa el medio especializado Defense Express.
Aunque son efectivos para operaciones tácticas, como la destrucción de vehículos blindados y objetivos en la primera línea, su alcance limitado y la pequeña capacidad de su carga explosiva, que no supera unos pocos kilos, los hacen incapaces de reemplazar el impacto estratégico de los misiles Taurus. Estos últimos están diseñados para destruir instalaciones fuertemente fortificadas y poseen una ojiva de 480 kilogramos.
La decisión de Alemania de no suministrar los misiles de largo alcance se ha convertido en un tema recurrente en el debate sobre el apoyo occidental a Ucrania. Si bien los drones Helsing representan un avance tecnológico significativo y un refuerzo importante para las capacidades tácticas ucranianas, tampoco suplen la necesidad de armamento que permita neutralizar objetivos clave en el interior del territorio ocupado por Rusia.