'Los Angeles Times' desentierra "la razón de 500 años" para la exclusión de Felipe VI de la investidura de Sheinbaum
La no invitación del monarca español ha reavivado las tensiones diplomáticas entre ambos países, latentes desde hace cinco años por un cruce incompleto de cartas.
La histórica toma de posesión de Claudia Sheinbaum como primera mujer presidenta de México el 1 de octubre marcará un antes y un después en la política del país, pero la cita a la que sí acudirán mandatarios de todo el mundo, estará marcada por la notoria ausencia del rey Felipe VI. La exclusión del monarca español en la lista de invitados ha reavivado la "pausa diplomática" entre España y México que el aún presidente, Andrés Manuel López Obrador, se sacó de la manga en 2019 como represalia por no obtener una respuesta a la carta enviada al Palacio de la Zarzuela en la que le exigía una disculpa pública por, según cuenta 'Los Angeles Times', lo sucedido hace 500 años en la colonización de América.
"La conocida como 'conquista' se logró con la espada y la cruz", afirmó entonces López Obrador en un vídeo en el que explicaba las intenciones de la carta que se había enviado a Felipe VI. "Miles de personas fueron asesinadas en este período. Se impuso una cultura, una civilización, hasta el punto de que todas las iglesias católicas se construyeron sobre los templos de los pueblos prehispánicos", aseguró el presidente mexicano, para quien la petición de disculpas al monarca español no se trata solo de un gesto simbólico, sino un acto necesario para resarcir el orgullo y la dignidad de los pueblos indígenas mexicanos.
López Obrador, nacido al sur de México, en una región donde se establece gran parte de la población indígena del país, ha centrado gran parte de su política en el reconocimiento de esas culturas y a la recuperación del orgullo. De hecho, el compromiso de AMLO por honrar la memoria de los pueblos indígenas quedó reflejado en su propia investidura, en 2018, cuando participó en una ceremonia indígena en la que quedó bendecido, pese a que sus críticos señalaron que uno de sus abuelos había nacido en Cantabria, España.
Aquella carta que envió López Obrador jamás encontró réplica, ni desde La Zarzuela ni desde La Moncloa, que sí reaccionó "con toda firmeza" contra todas las peticiones que había hecho AMLO, como también se le conoce al presidente mexicano, en la misiva. El argumentario, quedaba claro en el primer comunicado que publicó hace 5 años el Ejecutivo español: "La llegada, hace quinientos años, de los españoles a las actuales tierras mexicanas no puede juzgarse a la luz de consideraciones contemporáneas".
Un lustro después de aquel episodio, la relación diplomática de España y México, aunque históricamente cercana, sigue siendo tensa. Más, ahora que la futura presidenta del país, Claudia Sheinbaum, justificaba la exclusión de Felipe VI de su acto de investidura por no haber obtenido una respuesta a la petición de López Obrador. "Lamentablemente, esta carta no mereció una respuesta directa como habría correspondido a la mejore práctica diplomática", aseguraba esta semana la sucesora de AMLO, quien ha prometido continuar con muchas de las políticas puestas en marcha por su predecesor.
Tras calificar de "inaceptable" el que no se hubiera invitado al rey Felipe VI, el Gobierno de España notificó que se había decidido "no participar en dicha toma de posesión a ningún nivel". En este sentido, la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, a la que habían invitado al acto, ha decidido acatar la directriz de Exteriores y no acudirá a la cita.
El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha solicitado comparecer a petición propia ante la Comisión de Exteriores del Congreso para explicar la decisión tomada por el Gobierno. Albares, que tiene pendiente la comparecencia para dar explicaciones sobre el traslado a España de Edmundo González. A priori, dicha comparecencia se producirá el 4 de octubre, por lo que cabe la posibilidad de que el ministro aproveche la ocasión para hablar también de la crisis diplomática reabierta con México.