Los 5 modelos de paz que tienen Putin y Zelenski sobre la mesa para el fin de la guerra
Se barajan cinco opciones para llegar a la paz en el conflicto: el modelo finlandés, el plan que sugiere Alemania, el que plantea Trump, el de Brasil y China y el modelo israelí.
Llegar a un acuerdo para alcanzar la paz en Ucrania no será tarea fácil. A la falta de conversaciones se unen también las distintas premisas que cada país pone sobre la mesa para poder hablar sobre el fin del conflicto. Algunas de las principales propuestas son el 'Plan de la victoria' de Zelenski, el modelo que plantea Israel, el sugerido por Trump, el que reclama Putin, el plan de Brasil-China, el modelo alemán o el finlandés.
Sin embargo, ya que Ucrania y Rusia son las dos potencias protagonistas en esta guerra, solo son cinco los planes que pueden poner en práctica para que una de las dos potencias no sea la que someta a la otra, puesto que de lo contrario, imponer el plan de alguno de estos países sería considerar que es el victorioso.
El plan de Zelenski
Una de las principales intenciones del mandatario ucraniano es restaurar las fronteras que estaban establecidas antes de 2014, es decir, recuperar el control de regiones como Donetsk y Luhansk, además de Crimea. Además, otro de los puntos en los que insiste es en el hecho de que su país se una algún día como miembro a la OTAN y así garantizar que Rusia no ataque su territorio de nuevo. "Si el conflicto se congela sin una posición fuerte para Ucrania, Putin vendrá en dos, tres, cinco años... regresará y nos destruirá completa y completamente", afirmó Zelenski en una rueda de prensa el pasado domingo.
"Ucrania está perdiendo terreno lentamente bajo los implacables ataques rusos, su red eléctrica está hecha jirones, muchas ciudades del este están en ruinas y millones de personas son refugiados. Mientras tanto, Rusia está sufriendo pérdidas militares récord, se ha visto afectada por sanciones internacionales cada vez más estrictas y su economía está en problemas", destacó el mandatario ucraniano.
De este modo, el ucraniano propone como solución el llamado 'Plan de la victoria', compuesto por cinco puntos principales, en el que se recoge la invitación de unirse a la OTAN, la eliminación de restricciones para el uso de armas, fortalecer la seguridad en Europa después del conflicto o el desarrollo de recursos económicos de Ucrania y sus aliados. Algunos de estos puntos ya han comenzado a realizarse, como el levantamiento de prohibiciones en el uso de armas occidentales contra suelo ruso de algunos países como Reino Unido o Estados Unidos.
El plan de Putin
Los objetivos de Vladímir Putin, sin embargo, son totalmente opuestos. El ruso reclama la no unión de Ucrania en la alianza, el abandono de las tropas ucranianas de las zonas ocupadas por Rusia, que el país de Zelenski se convierta en una potencia neutral o garantizar los derechos de los pueblos de habla rusa. Además, pide a Occidente que abandone las sanciones impuestas contra su país y algunas personalidades rusas y que soporte la carga financiera para la reconstrucción de Ucrania.
"Para nosotros no hay absolutamente ninguna alternativa para lograr nuestros objetivos. Tan pronto como esos objetivos se alcancen de una forma u otra, la operación militar especial terminará", afirmó el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
El objetivo de Trump
El republicano, quien se alzó con la victoria en las elecciones presidenciales de Estados Unidos con el partido republicano, prometió antes de los comicios, que en caso de resultar ganador acabaría con la guerra en Ucrania "en 24 horas". Sin embargo, no ha explicado aún cómo lo hará. Lo que sí se conoce es que nombró recientemente al teniente general retirado Keith Kellog, quien presentó en julio de este año un plan a Trump que incluía un ultimátum para obligar a ambas potencias a negociar, como enviado especial para negociar una tregua.
Dicho plan establecía que Estados Unidos continuaría entregando armas a Kiev solo si se ofrece a entablar conversaciones con el país de Putin y si rechaza unirse la OTAN como miembro a cambio de un acuerdo de seguridad. En el supuesto de que Rusia tampoco estuviese dispuesta a hablar, Estados Unidos también proporcionaría armamento a Ucrania. Respecto a la eliminación de las sanciones internacionales impuestas a Rusia, estas se levantarían en el caso de que el país decidiese entablar conversaciones con Ucrania y de forma equitativa. Asimismo, Rusia estaría obligada, a través de un impuesto a las exportaciones rusas, a reconstruir Ucrania.
El plan Brasil-China
En mayo de este año, China y Brasil presentaron su propuesta conjunta para alcanzar una negociación de paz, centrada en congelar el conflicto sin escalada ni provocación. Algunas de las iniciativas que propone es la prohibición de ataques a centrales nucleares, el fortalecimiento de la cooperación internacional, el diálogo directo y la reducción de las tensiones hacia un alto el fuego, el intercambio de prisioneros de guerra y la ayuda humanitaria.
Por ahora, se han unido diecisiete países a este plan, siendo Turquía el único miembro de la OTAN en ese grupo. "Las resoluciones propuestas por China y Brasil contienen todas las palabras correctas, como llamados a la paz, la justicia y el respeto del derecho internacional. Nadie lo discutirá. Cómo exactamente planean lograr la paz, todavía no me han informado", defendió Serguéi Lavrov, ministro de Asuntos Exteriores de Rusia.
El modelo israelí
Algunos dirigentes, como Joe Biden, abogan por copiar otros modelos como el israelí, ya que no forma parte directa de la OTAN (a pesar de ser un aliado de Estados Unidos y otros países europeos). Sin embargo, este modelo, además de poco detallado, puede arrastrar a Ucrania a vivir continuamente bajo amenaza de guerra y a dejar el país como una potencia frágil e incapaz de reaccionar por sí solo.
Otro de los obstáculos que frenan a los principales líderes europeos en este plan es el hecho de armar a Ucrania. "¿Cómo podemos armar hasta los dientes a un país en nuestras fronteras sin saber quién será su futuro líder y si seguirá siendo nuestro socio", se preguntó uno de los diplomáticos de la Unión Europea (UE) tras escuchar este plan. María Zkharova, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, también planteó el mismo miedo, afirmando que el suministro de estas armas "puede conducir a una escalada incontrolada".
El plan alemán
Otro de los planes que se plantean sobre la mesa es copiar el plan alemán que se aplicó durante la Guerra Fría. Es decir, dividir el territorio en dos partes, una occidental y otra oriental, gobernadas por Occidente y por Rusia respectivamente.
"Si queremos detener la fase caliente de la guerra, necesitamos tomar el territorio ucraniano bajo nuestro control bajo el paraguas de la OTAN", afirmó Zelenski, quien parece estar a favor de esta iniciativa, a Sky News. Sin embargo, este plan parece incomodar al Kremlin, que se opone a que cualquier parte de Ucrania acceda a la alianza.
El modelo finlandés
Finlandia tuvo que ceder parte de su territorio tras ser atacada por Moscú en 1939. Además, tuvo que declararse como potencia neutral para evitar una ofensiva rusa. Al cabo de los años, Finlandia abandonó su posición e ingreso en la OTAN, como respuesta a la invasión rusa de Ucrania. Sin embargo, Finlandia, piensa que se trata de una mala idea.
"Ucrania era neutral antes de ser atacada por Rusia. Esto definitivamente no es algo que quisiera imponer a Ucrania. Definitivamente no como una primera alternativa", afirmó la ministra finlandesa de Asuntos Exteriores, Elina Valtonen, en el mes pasado.