La OTAN se arma con nuevas bombas nucleares en medio de las amenazas rusas
Estados Unidos ha afirmado que la producción de su bomba nuclear más reciente se ha completado con éxito. Ahora serán desplegadas en bases europeas.
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Estados Unidos ha confirmado la transferencia de bombas nucleares B61-12 hacia bases europeas de vital importancia en el marco de su programa de "intercambio nuclear". Así lo ha informado la administradora principal del programa de EEUU, Jill Hruby, en declaraciones al Instituto Hudson realizadas el pasado jueves 16 de enero. "Las nuevas bombas de gravedad B61-12 están totalmente desplegadas en el frente y hemos aumentado la visibilidad de la OTAN hacia nuestras capacidades nucleares", ha destacado Hruby en su intervención.
El anuncio se ha producido apenas una semana después de que la Administración Nacional de Seguridad Nuclear (NNSA) asegurase que se había completado con éxito la producción de la bomba termonuclear de gravedad más reciente de Estados Unidos. "En diciembre de 2024, el programa de extensión de la vida útil de la bomba B61-12 alcanzó su última unidad de producción, terminando su ciclo de producción", ha subrayado en Eurasian Times el pasado sábado 18 de enero.
En este sentido, y para poder prepararse ante la llegada de estas bombas nucleares, las bases han comenzado a llevar a cabo ampliaciones y costosas mejoras, entre las que se "incluyen la instalación de perímetros de seguridad de doble valla, la modernización de los sistemas de almacenamiento y seguridad de armas y de los sistemas de comunicación y visualización de las alarmas". Junto a estas mejoras, "también se está añadiendo una plataforma de carga diseñada para aviones estadounidenses C-17 que transportan armas nucleares en Kleine Brogel (Bélgica), Büchel (Alemania), Ghedi (Italia) y Volkel (Países Bajos)".
Las informaciones salieron a la luz justo en el momento en el que un grupo de activistas en contra de las armas nucleares, conocido como Acción No violenta por la Abolición, se encontraban a tan solo 25 kilómetros de la base aérea alemana de Büchel, al sur de Colonia, para reunirse con Susan Crane, quien fue liberada tras ser encarcelada como resultado de unas protestas en la base.