La crisis de la UNRWA se agrava: ya son 16 los países que han frenado su financiación
Guterres pide a los países que han suspendido sus contribuciones que, al menos garanticen, la continuidad de las operaciones de la Agencia de la ONU.
Rumanía sigue la estela de los 15 países que ya han anunciado la suspensión de financiación que dan a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) por los supuestos vínculos de algunos trabajadores con Hamás.
Si el último en confirmar dicha postura fue Japón, a través de un comunicado a última hora del domingo en el que se aseguraba que el país nipón "está extremadamente preocupado por la presunta participación de miembros del personal de la UNRWA en el ataque terrorista contra Israel el 7 de octubre del año pasado" algo que propició que la Cancillería japonesa exigiera una "investigación formal", ahora ha sido el turno de Rumanía.
El país del este de Europa ha hecho oficial el anuncio durante este lunes, uniéndose así a Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Finlandia, Australia, Francia y Japón, Austria y los tres países bálticos.
A través de un comunicado del Ministerio de Exteriores, se afirma que "las denuncias deben ser investigadas inmediata- y exhaustivamente por parte de la ONU", y agregó que hasta que estas no concluyan no habrá "nuevas contribuciones voluntarias a la UNRWA".
Por otra parte, el Ministerio subrayó que las necesidades de los civiles palestinos siguen siendo una prioridad y prometió mantener la coordinación con sus socios locales y europeos.
La UNRWA anunció el despido inmediato de varios miembros de su personal, y el inicio de una investigación "para establecer la verdad" y "para proteger la capacidad de la agencia de prestar asistencia" en Gaza, donde el 85% de la población (1,9 millones de palestinos) está desplazada y viviendo una crisis humanitaria sin precedentes. Con más de 30.000 empleados, la UNRWA es la mayor organización de Gaza al margen del Gobierno de la Franja, controlado de facto por Hamás desde 2007.
Guterres pide no retirar la ayuda
El secretario general de la ONU, António Guterres, ha recordado a los países que han suspendido su aportación económica la importancia que tiene el trabajo de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés), en particular en la Franja de Gaza.
"Dos millones de civiles de Gaza dependen de la ayuda de la UNRWA para su supervivencia diaria, pero los fondos con los que cuenta actualmente la UNRWA no le permitirán cubrir las necesidades para febrero", ha explicado.
"Comprendo las reservas" de los países que han anunciado la suspensión, ha asegurado Guterres. "Yo mismo me sentí horrorizado por estas acusaciones (pero) pido a los gobiernos que han suspendido sus contribuciones que al menos garanticen la continuidad de las operaciones de la UNRWA", ha apelado.
Los "abominables" actos de los que acusan a trabajadores de la UNRWA "deben tener consecuencias", "pero no hay que penalizar a las decenas de miles de hombres y mujeres que trabajan para la UNRWA en las situaciones más peligrosas". "Las necesidades de la población deben cubrirse", ha remachado Guterres.
Este sábado era el comisario general de la UNRWA, Philippe Lazzarini, quien advertía de que la suspensión de las aportaciones amenaza su labor humanitaria.
Lazzarini advirtió de que "sería inmensamente irresponsable castigar a una Agencia y una comunidad enterna por las acusaciones contra algunos individuos, en particular en un momento de guerra, desplazados y crisis política".
